Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por un tiradito de cachema y, de fondo, un chaufa de mariscos con cremitas y rocotito molido. Para la sed, una aguita de cebada con emoliente fresquecita. “María, un informe del programa ‘Domingo al día’ sobre los peligros de la Internet, debe ponernos en estado de alerta a todos los que tenemos hijos. La web, bien usada, puede ser un mundo maravilloso de oportunidades para estudiar, aprender, trabajar, pero mal usada puede ser fuente de desgracias, especialmente para los menores.
El reportaje dejó en evidencia que hay ‘monstruos’ que no tienen problemas en publicar abiertamente anuncios en los que ofrecen dinero a menores de edad a cambio de sexo. Mientras más jóvenes sean las chicas, prometen pagarles más. Estos depravados pueden pertenecer hasta a grupos internacionales de pederastas que comparten imágenes de niños y niñas en actos sexuales.
También hay páginas en las que se promueve el consumo de drogas y la pornografía, incitan al suicidio, a la bulimia, la anorexia y otros. Hasta hay páginas en redes sociales en las que asesinos a sueldo ofrecen matar a cambio de dinero. ‘Si tu esposa te engaña, si necesitas recuperar tu dinero, si necesitas desaparecer a esa persona que le hace daño a tu familia y si estás decidido a dar ese paso radical, contáctanos’, dice uno de los avisos.
La policía pide que si alguien ve este tipo de páginas, lo denuncie de inmediato para que se inicien las investigaciones. Como vemos, los riesgos en Internet son numerosos y muy graves para los chicos, por eso, algunos consejos:
Es importante instalar en la computadora filtros de control parental que ayudan a bloquear el acceso a páginas para adultos y otros contenidos peligrosos. Hay filtros gratuitos y pagados.
La computadora debe estar ubicada en un ambiente común de la casa. Los chicos no deben tener una en su cuarto. También se debe limitar el tiempo en que navegarán. Igual debe hacerse con la televisión.
Los menores que manejen cuentas en redes sociales deben tener claro que solo pueden guardar como contactos a personas que conozcan personalmente, como compañeros de estudios, primos, vecinos de su edad. Los padres deben conocer a todos los contactos. Debe estar prohibido hacer amistades en Internet.
Los menores deben estar algunos días sin conectarse a la red. Así no dependerán tanto de estas tecnologías y podrán compartir con la familia. El uso sin control de la Internet puede llevar al aislamiento”. Gary tiene razón. Me voy, cuídense.