Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por unos tallarines verdes con un churrasco jugosito. Para tomar pidió una jarrita de chicha morada. “María, el exjugador de la selección peruana de fútbol, Juan Manuel Vargas, se salvó de sufrir graves lesiones tras chocar contra un poste de luz con su camioneta, en Magdalena.
Se investiga si el exjugador de la ‘U’ y la Fiorentina de Italia estaba tomado al momento del accidente, aunque él asegura que no tomó. De todas maneras, esto nos debe llevar a reflexionar sobre la importancia de acatar las normas de tránsito en todo el país.
El alcohol es una sustancia que tiene efectos negativos en la función del cerebro, afectando el pensamiento, la capacidad de razonar y la coordinación muscular, habilidades esenciales para operar un vehículo de manera segura. Y si a esto le añades la falta de sueño, se vuelve una combinación peligrosa.
Muchos choferes ocasionan choques y atropellos porque se quedan dormidos al volante. Por más que se repita, muchos conductores no hacen caso a los consejos.
Si vas a tomar licor, no saques tu carro. Lo mejor es tomar un taxi por aplicativo. Así te puedes emborrachar cuanto quieras sin causar daño a nadie. Los carros se pueden convertir en un arma poderosa y mortal en las manos equivocadas. También están los correlones, los que se pasan la luz roja, no hacen señales o se meten contra el tráfico.
- Conoce las reglas de tránsito. No solo es saber conducir. Familiarízate con las señales y normas.
- Mantén la calma en el tránsito pesado. No te pelees con nadie, así te provoquen. No hagas competencias ni cierres a los demás.
- Estaciona con cuidado. Mira bien tus espejos, asegúrate de que no haya gente detrás, en especial niños.
- Respeta a peatones y ciclistas. Si andas apurado, no salgas. Un atropello fatal te puede malograr la vida.
- Mantén tu vehículo en buen estado. Esto es muy importante. Revisa tus llantas, batería, frenos, luces, dirección”. Me voy, cuídense.
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