El fotógrafo Gary llegó al restaurante por un bufé criollo con carapulcra, olluquito, ají de gallina, seco de res y cebiche. Para bajar la grasita, se pidió una jarrita con agua de cebada.
“María, se acercan las fiestas de fin de año. Si queremos que sean inolvidables, disfrutarlas en familia y sobre todo sin problemas, debemos tener más cuidado que nunca. En este mes aumentan los incendios, asaltos, accidentes de tránsito y muchas otras situaciones feas que nos obligan a estar más atentos que de costumbre. Pero, además, muchas veces nos excedemos en los gastos, lo que luego nos puede traer serios problemas. Para tener en cuenta:
Evita retirar fuertes sumas de dinero de los bancos. Si usas cajero automático, no elijas uno que esté en una zona oscura y solitaria.
No tomes cualquier taxi en la calle. Utiliza los servicios de alguien conocido o de una empresa.
No luzcas joyas costosas ni hables de dinero delante de extraños.
Trata de no contestar el celular en la calle.
No dejes la casa sola. Al contrario, encárgala a alguien de confianza.
Asegura puertas y ventanas de tu hogar cuando salgas o cuando te vayas a dormir. Invierte en sistemas de seguridad para tu hogar. Si puedes, compra cámaras.
Si manejas, no lo hagas después de haber bebido alcohol. Conduce siempre a la defensiva, respeta los límites de velocidad, evita hacer maniobras riesgosas y tocar el claxon.
No estaciones tu automóvil en la calle. Usa una playa de estacionamiento siempre que puedas.
Si vas a realizar compras, prepara una lista de lo que piensas adquirir y lleva el dinero justo. Así no te excederás en los gastos.
No lleves ancianos ni niños pequeños a hacer compras, sobre todo a mercados muy concurridos, para evitar que se cansen o pierdan.
No te excedas en los gastos para la compra de regalos. Es importante que hagas un presupuesto y destines solo una parte de tu dinero. Sino, después tendrás problemas para el pago de servicios y deudas.
Trata de no llevar siempre contigo tu tarjeta de crédito para evitar robos y no gastar de más.
Evita beber licor o, si lo haces, consume poco. El alcohol altera los sentidos, provoca muchas veces situaciones de violencia y convierte al que ha bebido en blanco fácil de los delincuentes, sin contar el dinero que se gasta.
En estas fechas, si tienes tiempo, trata de pasar más tiempo con la familia. Sobre todo si hay hijos, pues ellos te necesitan y siempre recordarán los momentos que están contigo”. Gary tiene razón. Me voy, cuídense.