Las mujeres deben respetarse

Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por un lomo saltado a lo pobre con su arrocito y rocotito molido. Para tomar pidió refresco de lima limón para bajar el calor. “María, desde hace dos semanas el Perú entero asiste expectante al escándalo de Christian Domínguez y su esposa Pamela Franco, luego que el cantante le fue infiel con más de dos chicas, con una de ellas en el ya famoso ‘auto rana’.

Pero cuando todos apuntaban sus misiles a Domínguez por sacar los pies del plato otra vez, apareció Pamela López, la aún esposa del jugador Christian Cueva, para denunciar que la cumbiambera se había metido con el padre de sus hijos y hasta mostró conversaciones y una transferencia de dinero. Ayer, Franco apareció en un programa de televisión para admitir que tuvo un romance con el seleccionado, pero en 2018, antes de estar con Christian Domínguez. Dijo que creyó en las palabras de Cueva, quien le dijo que se estaba divorciando de su esposa.

Estas confesiones han desatado una serie de comentarios. Lo primero, ¿qué hace que una chica guapa, joven y con un futuro profesional promisorio se meta con un hombre casado? Esto de que la engañaron no suena convincente. En estos tiempos de redes sociales e Internet, se sabe casi todo de las personas. Basta con googlear para tener un perfil exacto de la gente que conocemos.

Más aún de un personaje mediático como el mediocampista. ¿Qué buscan las chicas en un hombre casado? ¿Dinero, fama, comodidades, placer? Yo tengo hijas a quienes crío para que sean independientes. Que tengan la capacidad de generar su propio dinero a base de trabajo y estudio. Y procuro que su entorno sea el mejor y alejado de los vicios y malas juntas. ¿Se sentirán orgullosos los padres de las chicas que rompen un matrimonio? Desde aquí les aconsejo que tengan autoestima y un poquito de vergüenza. Y que se asesoren mejor antes de meter la pata.

• Los valores siempre deben primar en nuestra vida. Para todo. Para conseguir trabajo, oportunidades y amor. El engaño, la traición y la poca vergüenza no llevan a nada bueno.
• Estos son tiempos de chicas empoderadas, independientes y profesionales. Juntarse a un hombre por dinero, protección o gustito no corre.
• Las malas amistades deben ser expectoradas de nuestras vidas. Esas que te aplauden las ‘travesuras’ no sirven.
• Procura ir derechito por la vida y aprende a decir ‘no’ a una propuesta indecente. No se cae el mundo si rechazas una relación imposible, por más plata que tenga ese hombre o que sea guapo”. Me voy, cuídense.

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