Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por un lomo al jugo con papas nativas fritas, arrocito blanco y, para tomar, un emoliente calientito. “María, ayer durante el brindis por los 23 años de Trome hablábamos de la importancia de que la gente mantenga la fe, las esperanzas, sobre todo en los tiempos más difíciles.
Por eso, el programa que Luis Guadalupe tiene en Trome se llama ‘La fe de Cuto’, para subrayar la frase más conocida del carismático exfutbolista: ‘La fe es lo más lindo de la vida, el de arriba es lo más lindo de la vida, allá los incrédulos. Yo, gracias a Dios, estoy donde estoy gracias a él’, dijo en el ya lejano año 2011 cuando defendía la casaquilla del Juan Aurich de Chiclayo, tras coronarse campeón del fútbol peruano luego de enfrentar a Alianza Lima.
Obstáculos, caídas, dificultades, problemas, crisis siempre van a existir. También los grandes retos que muchos pueden creer imposibles de superar, pero que sí se pueden vencer. Todo es parte de la vida, así que debemos estar seguros de que los momentos malos no duran para siempre. No hay que rendirse, sino seguir en la brega para lograr mejores tiempos. Algunos consejos de los que saben:
- Pide ayuda. Rodéate de personas que te den apoyo. Solicita opiniones y ten en cuenta otras formas de pensar.
- Elabora planes. ¿Cómo te gustaría vivir? Visualiza qué ves, dónde te ves y qué necesitas para llegar allí.
- Entrena tu creatividad. Busca nuevas maneras de ver los problemas.
- Analiza cuáles cosas de tu vida puedes controlar y cuáles se salen de tu control. Así podrás centrarte en lo que depende de ti.
- Fortalece tu autoestima. La esperanza se sustenta en los recursos y la experiencia que tenemos.
- Busca participar en algún voluntariado y apoya a otros. Te sentirás mejor contigo mismo.
- Practica hábitos de vida saludables. Así tendrás un buen estado de ánimo. Por ejemplo, duerme bien, come sano, haz ejercicios”. Gary tiene razón. Me voy, cuídense.