Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por una cachemita frita con arroz graneado, yuca sancochada y sarsa criolla. Para tomar, jugo de maracuyá. “María, la calle está dura. No solo hay falta de trabajo, sino que los sueldos no suben y los precios se van hasta el cielo. Con eso, en muchos hogares los padres con las justas tienen para la comida y los servicios.
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En muchos de ellos los jóvenes ven postergados sus sueños de estudiar una carrera. Por eso ha caído como un balde de agua fría la reciente decisión de Pronabec, dependiente del Ministerio de Educación, de rebajar de cinco mil a 1194 el número de beneficiarios de Beca 18, el programa de ayuda a los estudiantes egresados de la secundaria que quieren estudiar alguna carrera. La razón es que no hay dinero.
Claro, para eso no hay dinero, pero sí hay para que el presidente viaje a Estados Unidos con una gran comitiva, o que los congresistas gestionen viajes al África para un insulso encuentro de parlamentarios del mundo. Tanto el Ejecutivo como el Legislativo trabajan de espaldas al pueblo.
No entienden las necesidades. Como ya cobran sueldos altos, viajan en camionetas 4x4 o sus cuentas bancarias crecen, se olvidan de los de abajo. Claro, van a decir que ellos se ‘sacrifican’ viajando para que el nombre del Perú sea conocido en el mundo y tenga presencia. Pamplinas, lo que hacen es aprovecharse de los dineros públicos.
Aunque, claro, este problema no debería ser obstáculo para seguir una carrera. Hay miles de estudiantes que cursan estudios universitarios o técnicos mientras trabajan. Muchos suben a los carros a vender dulces, manejan taxis, son obreros o vigilantes particulares.
Por eso, a los jóvenes que piensan que el mundo se les cae porque sus papás no pueden costearles una carrera, les digo que sí se puede. Les va a costar sangre, sudor y lágrimas, pero lo lograrán. Aquí algunos tips para ellos:
- Si no tienes apoyo de tus padres, consigue un trabajo, ahorra e ingresa a la universidad.
- Tus estudios son la prioridad. Deja las fiestas, las borracheras con los amigos o la compra de ropa fina.
- Trázate un objetivo. Todo lo que suceda son cosas que deben ayudarte en ese esfuerzo.
- Tendrás tropiezos, pero lo importante es levantarse y no dejar de mirar el objetivo.
- Ahorra mucho. Si puedes, trabaja más en las vacaciones o adelanta cursos de verano. Ahora se puede hacer en universidades privadas.
- Aplica a becas totales o parciales en universidades o institutos. Para ello debes tener buenas notas. En ese sentido, estudia mucho, concéntrate.
- Si no puedes pagar una universidad privada, pues ir a una nacional. Claro, es más esfuerzo para entrar, pero no hay nada imposible”. Gary da buenos consejos a los muchachos. Me voy, cuídense. LA CALLE ESTÁ DURA