Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por un tacu tacu de frijoles con un lomito al jugo montado y, para tomar, un refresco de camu camu. “María, el Internet es uno de los grandes avances tecnológicos que ha revolucionado la vida de las personas. Si hasta hace poco se debía gastar mucho dinero por una llamada telefónica a Europa o a otro lugar alejado, hoy puedes conversar con el hijo o la esposa todas las veces que quieras y, además, verles la cara en directo con una simple videollamada por WhatsApp, que puede ser gratis. Miles de personas dan y reciben clases desde sus casas, y se hacen grandes negocios a través de internet. Puedes pagar tus recibos de agua, luz, colegios, universidades y otros servicios desde la seguridad de tu casa. También leer miles de libros gratis o pagando una mínima cantidad. Pero también, millones de niños y adultos pasan horas en los juegos en línea o en los chats, conociendo y conversando con otras personas. Para muchos de ellos, internet es ‘todo’ su mundo. Paran pegados al smartphone o la computadora gran parte del día. Como que van perdiendo la capacidad de interrelacionarse con otros en persona. Peor aún, van perdiendo empatía, esa capacidad de ponerse en los zapatos de otro y, en el anonimato de la web, los cobardes escriben los más terribles ataques y cuelgan videos abominables. En Ohio, Estados Unidos, hace unos días, un desquiciado eligió en la calle, al azar, a un anciano y lo asesinó a sangre fría. ¡Todo lo transmitió por Internet! O la violación de una joven en una discoteca en Santa Anita por una bestia, que parecía excitarse más porque cometía el ultraje delante de otras personas y era grabado. Algunos consejos para que tus hijos usen bien el internet:
- Habla con tu hijo sobre el uso excesivo de la computadora. Tal vez busca escapar de la realidad, así que deberás averiguar por qué.
- Coloca la máquina en un área abierta de la casa, como la sala, un pasadizo. No la pongas en su cuarto.
- Establece una contraseña que solo tú sepas. Así tu hijo deberá preguntarte para poder usarla.
- Si pasa mucho tiempo ante la pantalla, pero sacando información legal, segura y decente, entonces no hay problema. Será útil para su educación.
- Pon límites de tiempo para el uso.
- Averigua qué ve tu hijo. Revisa el historial de visitas.
- Compra o descarga programas que prohiban el acceso a páginas de corte violento, sexual, racista y otros.
- Instala programas educativos para tus hijos.
- Asígnale a tu hijo más tareas o quítale otros privilegios si continúa usando la computadora en exceso.
- Advierte a tu hijo que si no controla su tiempo en la computadora, tendrás que quitársela por completo. ¡Y cumple tu palabra! Siempre date un tiempo para conversar con él”.
Gary tiene razón. Me voy, cuídense.
Si te interesó lo que acabas de leer, puedes seguir nuestras últimas publicaciones por Facebook, Twitter, y puedes suscribirte aquí a nuestro newsletter.