Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por un arroz tapado con carnecita molida, aceitunas negras, pasas, huevo sancochado, rocotito y, para tomar, una limonada fresquecita. “María, el país está sumido en una crisis política y económica terrible, en la que destacan los políticos deshonestos, corruptos e incapaces, que solo se preocupan por sus intereses, sin que les importe un centavo el bien común. Se llenan la boca hablando del pueblo, de los pobres, pero estos son los que menos les importan.
LEE TAMBIÉN: Alerta por el virus
Para ellos, las personas humildes solo valen porque votan. Una vez que cayeron en sus embustes y les dieron su voto, se olvidan de ellos. Siempre ha pasado, pero ahora es mucho más, se nota con mayor claridad. Si queremos cambiar eso, tenemos que enseñar a los niños valores, con la palabra, pero sobre todo con el ejemplo. De nada servirá que a tu hijo le digas que no mienta si tú lo haces. Depende de cada familia formar bien a sus hijos para que luego sean ciudadanos decentes, padres amorosos y responsables. Aquí algunos valores de enseñanza impostergable:
- Bondad. Es el deseo de hacer el bien, tener buenas intenciones con el resto de las personas, ser amable o ayudar en la medida de nuestras posibilidades.
- Sinceridad. Significa vivir y relacionarse sin intenciones ocultas a través de nuestros actos o palabras. Ser sincero con uno mismo nos lleva siempre a ser sincero con los demás.
- Empatía. Nos ayuda a ponernos en la situación de nuestros semejantes, también nos ayuda a entenderlos, apoyarlos y ayudarlos cuando es necesario.
- Amor. Es muy probablemente uno de los sentimientos más fuertes: ¡amor por el arte!, ¡por nuestros seres queridos!, ¡amor por lo que hacemos! Es el motor que inicia el dar y el recibir, el convivir, el compartir, el respetar o el confiar.
- Honestidad. Se debe tener un comportamiento decente y coherente entre el actuar, el pensar y decir. Es expresar siempre la verdad.
- Compromiso. Inculcar la fe y el respeto al trabajo para mejorar nuestras vidas y alcanzar las metas propuestas. Se debe creer en lo que se hace y realizarlo cumpliendo las normas, sin hacer daño a nadie.
- Profesionalismo. Se debe ejercer el trabajo con honestidad, calidad y métodos adecuados en el tiempo esperado.
- Responsabilidad. Es comprometerse de manera seria con los objetivos trazados y cumplirlos a cabalidad.
- Tolerancia. Hay que mostrar respeto, comprensión y flexibilidad ante posturas distintas, limitaciones de los demás, frente a las personas diferentes”. Gary tiene razón. Qué buenos valores. Me voy, cuídense.