Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por su sopita de choros con papita y culantro picado, pescado frito con arroz y, para tomar, limonada. “María, el frío está inaguantable. En la noche tengo que sacar doble frazada para abrigarme. Y entrar a la ducha es de terror, especialmente para los que no tienen terma.
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Los más vulnerables son los niños y los ancianos que tienen bajas defensas. Hay que tener cuidado con ellos y abrigarlos mucho, en especial cuando salen a la calle. Las mamitas tienen que variar un poco el menú.
Hay que hacer comidas con más calorías, tipo los caldos de gallina, las sopas y las pastas. Hay que evitar las bebidas heladas, no les vaya a dar una broncopulmonía.
No olvidarse del coronavirus que aún no se ha ido de nosotros. Ayer escuchaba en la radio que solo en Trujillo hubo dos muertos por coronavirus y hay más de mil infectados.
No le hagan caso a ese congresista que dice que con las dos dosis está bien. Debemos escuchar a las autoridades sanitarias. La vacuna evitó que siga muriendo la gente por millones en el mundo.
En el caso de Lima, el frío viene con humedad. No quiero ni pensar lo que deben estar pasando los niños que viven en el llamado ‘Ticlio chico’, en Villa María del Triunfo, donde la humedad llega al 100 por ciento y la temperatura es igualita al polo norte.
Este lunes muchos escolares regresan a clases tras las vacaciones por fiestas patrias. Ya saben que en las loncheras deben enviar alimentos con muchas calorías, como chocolate, galletas, huevos duros o carne. También obligarlos a llevar abrigos más gruesos y dejar de lado la moda. Primero es la salud. Aquí les dejamos algunos consejos para evitar que los niños y ancianos se enfermen:
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