Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó por su chuleta de chancho con papas doradas, ajicito molido y emoliente para bajar la grasita. “María, nos guste o no, la es parte de la vida cotidiana en la actualidad. Los niños y los adolescentes son nativos digitales y están aún más vinculados que los padres con los celulares e Internet, las redes sociales, el chat y todo lo relacionado. Los padres debemos tener en cuenta siempre que existen muchos peligros en las redes sociales y en el entorno digital, especialmente para los niños. Por eso, aquí te traigo unos tips sobre lo que podríamos hacer para reducir los riesgos.

Darles el ejemplo: Por naturaleza, el ser humano aprende, en los primeros años de vida, por repetición de lo que observa en su entorno. Los padres debemos dar el ejemplo de un debido uso del celular. Si uno es de los que pasa todo el día con el celular, el hijo hará exactamente lo mismo.

Cuidado con los riesgos visuales: Según los especialistas, los niños de 1 a 2 años no deberían usar ni estar expuestos a dispositivos electrónicos. Los que tienen entre 3 y 5 años, como máximo podrían utilizar estos aparatos una hora por día. Mientras que los mayores de 6 años podrían usarlos hasta un par de horas.

Sentido común y paciencia: Como en todo ámbito, el sentido común y la paciencia son fundamentales. Permitir un poco de esparcimiento personal es también necesario de vez en cuando.

Establecer reglas: Por ejemplo, sobre el uso que hagan del celular en el colegio, lo que ocurre si lo rompen, no sacarlo a la calle para evitar que se lo roben y cómo deben usar las redes sociales y las descargas.

Normas de confianza y comunicación: Debe brindar a su hijo la seguridad de poder comunicarse con usted al equivocarse en el uso del Internet. Con su acompañamiento, los errores tendrán solución y no tendrán repercusiones.

Fijar horarios y momentos: No solo para que el smartphone no sea usado durante horas de clase en el colegio, sino también cuando se acerca la hora de dormir. Tampoco en los lugares riesgosos ni cuando están en la mesa (desayuno, almuerzo o cena) o conversando en la sala.

Aprenda de sus hijos: Es normal que muchos menores entiendan mucho más fácil y velozmente la tecnología. Para conocer los riesgos, pruebe los sitios que su hijo usa de forma recurrente. Incluso usted los puede aprovechar”.

Mi amigo Gary tiene razón. Hay que estar al día con la tecnología. Me voy, cuídense.

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