Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por un chupe de pescado con limoncito y ají, arroz con mariscos y, para tomar, chicha morada. “María, vengo impactado por el reciente asesinato de un joven taxista, David Pedraza Hurtado, a manos de una presunta banda de robacarros. El muchacho salió a trabajar el jueves de la semana pasada por la noche y no regresó a su casa.
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La familia interpuso una denuncia de desaparición y ante la inacción de la Policía, ellos mismos se pusieron a investigar durante tres días. Tras seguir la pista del GPS del carro, lo encontraron en una cochera del distrito de Pachacámac, al sur de Lima. Cuando los policías entraron, hallaron el vehículo de David con un impacto de bala y huellas de sangre. Los vecinos del inmueble, al ser entrevistados, dijeron que hallaron a un joven tirado en el suelo y lo condujeron al hospital María Auxiliadora, donde falleció. La Policía detuvo al dueño del predio y a otro hombre como sospechosos.
¿Qué alma demoniaca puede acabar con la vida de un ser humano indefenso? ¿La vida de ese joven trabajador valió el precio de un carro? Esperamos que los detectives den con los asesinos y que el Poder Judicial los condene a muchos años de prisión. Solo así las calles estarán más seguras. Y necesitamos una Policía más profesional. Por el relato de los deudos, fue fácil hallar el auto siguiendo las señales del GPS.
¿Los agentes no pudieron hacer eso? Deben haber, además, más cámaras de videovigilancia, pero que sirvan para prevenir los delitos. No simplemente para que graben crímenes y estos se vean por televisión. Aquí unos consejos para los taxistas:
- No llevar clientes a zonas consideradas de alto riesgo, peligrosas o alejadas de la ciudad.
- Jamás lleve personas con evidentes síntomas de drogadicción o en estado etílico.
- Ponga atención cuando los pasajeros le indiquen una dirección falsa o inexistente.
- Atento a los movimientos de los pasajeros antes de que entren al carro, como señas o murmullos.
- Si en pleno recorrido sus pasajeros están realizando señas o nota cualquier actitud sospechosa, acuda a una comisaría.
- Si lleva dos personas, no permita que el que va atrás se ponga del lado del chofer.
- Sospeche cuando de forma intempestiva le piden cambiar la ruta del lugar antes pactado.
- Si el pasajero en pleno recorrido le indica subir a otra persona, no lo haga.
-No acepte golosinas, comidas o bebidas, podrían estar con drogas o somníferos”. Gary tiene razón. Hay que estar atentos ante tanta delincuencia. Me voy, cuídense.