Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por una sopita de casa, pollo frito con ensalada rusa y, para tomar, refresco de maracuyá con hielo. “María, las cosas subieron como globos de gas en todos los mercados tras el paro de transportistas de carga, quienes han bloqueado las principales carreteras del país.
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No están llegando los productos a los principales centros de abasto, en especial de la capital. Por eso el pollo, las verduras y las frutas se han ido hasta el cielo, para horror de las amas de casa.
El miércoles el presidente del Consejo de Ministros, Aníbal Torres, pidió, con evidente desconocimiento de la situación, que se sustituya en los hogares peruanos el pollo por el pescado, pero este ha subido por la cercanía de la Semana Santa.
En otras circunstancias sería una buena sugerencia y lo refrendan los nutricionistas. El Perú consume 49 kilos de pollo por persona al año, mientras que los productos marinos solo llegan a los 17 kilos.
El bonito, caballa, jurel o pota son mucho más baratos que el ave y tienen más valor nutritivo. Extraña que un país con un mar tan inmenso no consuma más productos hidrobiológicos.
Los nutricionistas también aconsejaron que, ante la escasez o el alto precio, sustituyan la leche evaporada por leche fresca, leche en polvo o queso. En el Perú se consume 87 litros por persona al año, pero la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) aconseja no menos de 120 litros. O sea, estamos al debe.
El aceite es otro de los productos que están demasiado caros, pero no por el paro, sino porque es importado y con el flete marítimo tan costoso es evidente que tiene que subir su precio.
Para no gastar mucho, se puede optar por preparar alimentos como verduras, huevos y pescados que requieren poco aceite. Hay que consumir más ensaladas frescas o cocidas y platos con más verduras, que no solo son baratos sino que hacen bien al organismo.
Ah, y para ahorrar en el gas propano (en algunos distritos está cerca de 70 soles el balón), deberíamos cambiar los métodos de cocción, para que se consuma menos combustible, como los salteados, baño María, al vapor, a la plancha o escalfado.
Debes consumir alimentos que requieran menos tiempo de cocción, como los pescados y vegetales. Otro consejo, cocina tus fideos para el tallarín hasta que no estén excesivamente blancos, esto ayuda a conservar la mayor cantidad de nutrientes.
Ahora que hace mucho calor, no calientes demasiado las comidas en el microondas. Toma jugos”. Pucha, mi amigo Gary da buenos consejos en estos tiempos de crisis. Me voy, cuídense.
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