Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por su plato de arroz con mariscos y una jarra de chicha morada heladita para refrescarse.
“María, arrancaron los carnavales y dan ganas de darse una refrescadita. Este es el mes de los globos, los chisguetes, salidas a las piscinas, la playa y baldazos de agua en la calle. Febrero es el mes alegre y caluroso, pero también la época en la que suele gastarse demasiada agua. Los muchachos juegan a mojarse entre amigos del barrio y pasan una tarde refrescante y divertida. Otros jóvenes, y no tan jóvenes, más palomillas, salen a mojar a las personas o incluso a los buses, carros o motos.
Hasta llegan a tal extremo de mojarlos con pintura, talco o barro, arruinando la vestimenta de las personas que van a trabajar o a estudiar. Este desperdicio de agua es la otra cara de la moneda, pues hay zonas en los asentamientos humanos y en el interior del país donde ni siquiera hay agua y las personas tienen que caminar largos tramos para sacar agua de un río o un caño que sirve para cientos de vecinos. No es justo que algunos desperdicien el agua que otros necesitan para vivir. Aquí te dejo algunos consejos para controlar óptimamente el uso del agua:
- Revisar las tuberías del hogar. Puede haber algún hueco pequeño, suficiente para que el agua se escape, además, puede hacerse más grande con el tiempo.
- Abrir la llave de la ducha moderadamente. Tampoco es necesario tenerla abierta cuando se esté usando el jabón o el champú.
- Evitar el uso de mangueras, sea para regar las plantas o lavar el auto o la moto. La presión del chorro hace usar demasiada agua.
- En caso de tener piscinas inflables, armables o construidas, hacer que el agua dure varios días, no llenarla cada vez que vamos a usarlas. Pero tener cuidado con convertir estos lugares en focos infecciosos para la aparición de mosquitos y zancudos.
- Cada cierto tiempo y antes de dormir, asegurarse de que los grifos de la casa estén bien cerrados.
- Poner regular ropa en la lavadora para aprovechar la cantidad de agua. Sería imprudente gastar tanta agua para lavar solo un par de prendas.
- Cuando se lavan las vajillas, el caño solo debe permanecer abierto mientras se estén remojando, no tenerlo abierto todo el rato.
- Procurar no jugar llenando globos de agua o pistolas de agua, toda esa cantidad del líquido elemento se puede aprovechar a futuro.” Pucha, tiene razón mi amigo Gary, a cuidar el agua se ha dicho. Me voy, cuídense.