Este Búho habrá nacido de noche, pero no anoche. Ya se consumó el primer acto o llamémosle el ‘ensayo’, para dejar fuera de competencia al candidato de Todos por el Perú, . No me como el cuento de la ‘imparcialidad’ del Jurado Nacional de Elecciones, por más que su presidente Francisco Távara haya votado en contra. Cuando el ‘moradito’ estaba refundido en el rubro ‘otros’ y ni siquiera figuraba entre los ‘Pitufos’, no se molestaron en revisar su caso. Pero en febrero, cuando ya sorprendía en las encuestas y pasó al segundo lugar, detrás de Keiko Fujimori, el Registro de Organizaciones Políticas rechaza su inscripción. Todo en tiempo récord, más veloces que Usain Bolt en una carrera de cien metros planos. La suerte de Julio Guzmán está en manos, ahora, del Jurado Electoral Especial Lima Centro 1.

Y la verdad, todo esto me parece algo más que sospechoso, pues se da por un tema estrictamente técnico. ¿Las autoridades electorales están midiendo a todos con la misma vara? Me parece que no. Otros postulantes al ‘Sillón de Pizarro’ tienen peores ‘chicharrones’. Por un lado está César Acuña (Alianza Para el Progreso), que no solo es acusado de plagio, también se le imputa regalar plata como cancha a cambio de votos, lo que constituye una flagrante violación a la Ley de Partidos Políticos.

No hay que olvidarnos de Keiko Fujimori (Fuerza Popular) con sus costosos ‘coctelitos’ y en los Estados Unidos, la que no estaría bien fiscalizada. Y así hay otros. Con esto no quiero decir que Julio Guzmán es una mansa paloma, ya que la ley está hecha para cumplirse, además tiene que responder por su doble discurso y por los vínculos con el gobierno de Ollanta Humala y Nadine Heredia, entre otros temas oscuros. Pero la ley debe ser igual para todos, sin excepción alguna. Así funciona una verdadera democracia.

Algunos políticos como Verónika Mendoza, Pedro Pablo Kuczynski y el aprista Enrique Cornejo aseguran que Julio Guzmán debe seguir y que todos entren a la cancha en estas elecciones. No me cuadra eso de ganar en mesa. Keiko y Acuña defienden de la boca para afuera al ‘moradito’. Alan García se queda callado, como si tuviera la conciencia sucia. Se habla que las influencias del Partido Aprista en el Poder Judicial y los jurados electorales son legendarias. Lo denunció su mismísima actual aliada Lourdes Flores, allá por el año 2011. Aquí me gustaría hacer algo de historia: El arquitecto Fernando Belaunde Terry saltó a la arena política cuando defendió la inscripción de su candidatura, por los años 60, y la policía de la dictadura, que no lo quería como postulante, lo agarró a manguerazos del ‘rochabús’.

Así mojado, con la bandera, marchó por el Centro de Lima. Si uno quiere ser presidente debe demostrar fuerza para luchar contra las injusticias y defender la democracia. ¿Y quién se beneficiaría con la posible inhabilitación de Julio Guzmán? Keiko, quien no dormía pensando en una segunda vuelta con el ‘moradito’. Pero los votos del candidato de Todos por el Perú podrían migrar según Hernán Chaparro, de GFK, además de la misma ‘China’, también a Pedro Pablo Kuczynski, algo a Verónika Mendoza (Frente Amplio) y eventualmente a Alfredo Barnechea (Acción Popular).

Nada para Alan, pues la gente que apoya a Julio Guzmán dice que no quiere más de la política tradicional, de la cual están hartos. El panorama político está movido y ni hablar de lo que será el tablero electoral si es que Guzmán queda fuera de carrera. Soy consciente de que las normas están hechas para respetarse, pero no debe aplicarse la ‘ley del embudo’, donde lo ancho es para algunos y lo angosto para otros. Este Búho seguirá con los ojos bien abiertos. Apago el televisor.

Este Búho habrá nacido de noche, pero no anoche. Ya se consumó el primer acto o llamémosle el ‘ensayo’, para dejar fuera de competencia al candidato de Todos por el Perú, . No me como el cuento de la ‘imparcialidad’ del Jurado Nacional de Elecciones, por más que su presidente Francisco Távara haya votado en contra. Cuando el ‘moradito’ estaba refundido en el rubro ‘otros’ y ni siquiera figuraba entre los ‘Pitufos’, no se molestaron en revisar su caso. Pero en febrero, cuando ya sorprendía en las encuestas y pasó al segundo lugar, detrás de Keiko Fujimori, el Registro de Organizaciones Políticas rechaza su inscripción. Todo en tiempo récord, más veloces que Usain Bolt en una carrera de cien metros planos. La suerte de Julio Guzmán está en manos, ahora, del Jurado Electoral Especial Lima Centro 1.

Y la verdad, todo esto me parece algo más que sospechoso, pues se da por un tema estrictamente técnico. ¿Las autoridades electorales están midiendo a todos con la misma vara? Me parece que no. Otros postulantes al ‘Sillón de Pizarro’ tienen peores ‘chicharrones’. Por un lado está César Acuña (Alianza Para el Progreso), que no solo es acusado de plagio, también se le imputa regalar plata como cancha a cambio de votos, lo que constituye una flagrante violación a la Ley de Partidos Políticos.

No hay que olvidarnos de Keiko Fujimori (Fuerza Popular) con sus costosos ‘coctelitos’ y en los Estados Unidos, la que no estaría bien fiscalizada. Y así hay otros. Con esto no quiero decir que Julio Guzmán es una mansa paloma, ya que la ley está hecha para cumplirse, además tiene que responder por su doble discurso y por los vínculos con el gobierno de Ollanta Humala y Nadine Heredia, entre otros temas oscuros. Pero la ley debe ser igual para todos, sin excepción alguna. Así funciona una verdadera democracia.

Algunos políticos como Verónika Mendoza, Pedro Pablo Kuczynski y el aprista Enrique Cornejo aseguran que Julio Guzmán debe seguir y que todos entren a la cancha en estas elecciones. No me cuadra eso de ganar en mesa. Keiko y Acuña defienden de la boca para afuera al ‘moradito’. Alan García se queda callado, como si tuviera la conciencia sucia. Se habla que las influencias del Partido Aprista en el Poder Judicial y los jurados electorales son legendarias. Lo denunció su mismísima actual aliada Lourdes Flores, allá por el año 2011. Aquí me gustaría hacer algo de historia: El arquitecto Fernando Belaunde Terry saltó a la arena política cuando defendió la inscripción de su candidatura, por los años 60, y la policía de la dictadura, que no lo quería como postulante, lo agarró a manguerazos del ‘rochabús’.

Así mojado, con la bandera, marchó por el Centro de Lima. Si uno quiere ser presidente debe demostrar fuerza para luchar contra las injusticias y defender la democracia. ¿Y quién se beneficiaría con la posible inhabilitación de Julio Guzmán? Keiko, quien no dormía pensando en una segunda vuelta con el ‘moradito’. Pero los votos del candidato de Todos por el Perú podrían migrar según Hernán Chaparro, de GFK, además de la misma ‘China’, también a Pedro Pablo Kuczynski, algo a Verónika Mendoza (Frente Amplio) y eventualmente a Alfredo Barnechea (Acción Popular).

Nada para Alan, pues la gente que apoya a Julio Guzmán dice que no quiere más de la política tradicional, de la cual están hartos. El panorama político está movido y ni hablar de lo que será el tablero electoral si es que Guzmán queda fuera de carrera. Soy consciente de que las normas están hechas para respetarse, pero no debe aplicarse la ‘ley del embudo’, donde lo ancho es para algunos y lo angosto para otros. Este Búho seguirá con los ojos bien abiertos. Apago el televisor.

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