Este Búho tiene varios lustros siguiendo los tejes y manejes de la política en el país. Por eso, no creo en las casualidades ni en actos políticos ‘espontáneos’ como el del presidente Martín Vizcarra dando un ‘golpe’ de esos a los que nos tiene acostumbrados cuando se trata de enfrentar a un Congreso, como el actual, chúcaro, mediocre, irresponsable y populachero.
Con el anuncio de ayer, de convocar a elecciones generales para el 11 de abril del 2021, ha querido darle un ‘zarpazo’ al Legislativo y de paso subir unos puntitos en las encuestas. El anuncio con bombos y platillos de elecciones presidenciales era un acto muy bien calculado, incluso firmando el documento en vivo para que vean todos los peruanos de que la cosa iba en serio. Martín anunciaba su retiro. Eso sensibiliza a una población que sufre viviendo en un país casi destruido económicamente y a fin de año, si cae el PBI a 14% como vaticinan, habrá muchos más bolsones de pobreza. Los contagios aumentan con esta ‘nueva normalidad’, donde el transporte público es el nuevo conductor de pasajeros al más allá y según las cifras independientes -no oficiales- habría más de 20 mil fallecidos.
En estas dramáticas circunstancias, el anuncio tenía la obvia intención de arrancar en la mayoría de ciudadanos un clamor de que se queda desamparado: ‘No te vayas, presidente’. Y seguramente sus asesores esperan que ese clamor lo ayude a subir en las encuestas. ¿Qué le espera a Vizcarra para después del 11 de abril? Uno de sus graves errores fue creer en la antipolítica, prescindiendo de un partido que lo apoye desde el Legislativo. Creyó que podía gobernar sin problemas. Eso fue un gravísimo error. ¿Quién espera que llegue a la Presidencia para que evite cualquier revanchismo político en su contra? ¿Salvador del Solar? Uno de los que, sin querer, dio a luz a este engendro llamado nuevo Parlamento.
LOS CONGRESISTAS: Lo que parecía una exageración ya es una realidad. Este Congreso es peor que el que ‘disolvió’ Vizcarra. Ya no se le puede disculpar que actuaron en defensa de los aportantes a las AFP. Ese fue el inicio de una ‘borrachera’ de normas legislativas emanadas sin pies ni cabeza. Sin ningún soporte técnico como la suspensión de los peajes a nivel nacional, que más bien parece lobby a las grandes empresas de camiones. La ‘devolución’ del dinero de los aportes a la ONP u obligar a que en la Constitución se establezca que se debe destinar el 6% del PBI al sector Educación son propuestas que solo buscan ganar aplausos para la platea, pero totalmente inviables y fueron aprobadas sin siquiera pedir apoyo e información de los técnicos de los propios ministerios de Educación y de Economía.
Pero lo más patético es un evidente guiño a la corrupción cuando la Comisión de Constitución, ahora conocida como la nefasta ‘Comisión Chehade’, le dio vía libre para que los corruptos y sentenciados puedan postular en las elecciones. Esa jugarreta la apoyaron congresistas de Alianza Para el Progreso, Podemos, Fuerza Popular y Unión por el Perú, curiosamente todos tienen en sus filas tremendos ‘chicharrones’ judiciales. Cuando observaba el lamentable enfrentamiento entre el Ejecutivo y el Legislativo, recordé la genial respuesta de Jorge Luis Borges cuando le preguntaron cómo calificaba la guerra entre Argentina e Inglaterra por el conflicto de Las Malvinas. Él respondió: ‘Como la de dos calvos peleándose por un peine’. Apago el televisor.