Este Búho ve con gran preocupación la crisis que va en aumento en el país. Miles de indignados transportistas, mototaxistas, bodegueros y amas de casa golpeando sus cacerolas y otros ciudadanos víctimas de la extorsión marcharon por diferentes calles en varios distritos y protestando frente al Congreso, donde se enfrentaron con la Policía. Todos están hartos de ser amenazados y baleados por malditos asesinos. La convulsión social es grande y le puede estallar en la cara a la presidenta Dina Boluarte, quien parece no darse cuenta de la realidad, preocupada más en ponerse Bótox en la cara y en culpar de todo a la prensa, a la que sataniza con oscuras intenciones.
EL PREMIER EN UN MUNDO PARALELO: Mientras miles de pobladores de Puente Piedra, Comas, Independencia, San Juan de Lurigancho, Jicamarca y muchas otras zonas de la capital marchaban, cuando mercados y otros negocios permanecían cerrados, en ese mismo momento el presidente del Consejo de Ministros, Gustavo Adrianzén, declaraba a la prensa que todo estaba en calma y que las protestas son politizadas. ¡Increíble! No sé si de verdad este señor no se da cuenta de lo que está ocurriendo o trata de minimizar los hechos. Sus palabras llenan de rabia a la gente desesperada que solo sale a pedir que los dejen trabajar sin el temor de ser asesinados por no pagar cupos de dos soles.
¡NOS ESTÁN MATANDO!: Este pedido lo hizo a voz en cuello un exaltado chofer que marchaba por la Panamericana Norte rumbo al Congreso. ‘¡Nos están matando por un sol. Basta ya!’, dijo otro comprensivamente indignado. El premier y la presidenta Dina Boluarte deben entender que es la gente del pueblo desesperada e impotente ante tanta violencia y corrupción la que está saliendo a protestar. Los peruanos ya no aguantan más esta situación. Son personas que viven del día a día y que si no trabajan una jornada, como ayer, dejan de ganar dinero y ponen en riesgo la alimentación de sus hijos. Esto no es un juego. Para las autoridades es muy difícil de entender porque permanecen en sus oficinas con aire acondicionado, andan en carrazos del Estado con chofer y protegidos por policías en moto. Ignoran lo que padece el pueblo. No tienen empatía.
ARREMETIDA CONTRA LA PRENSA: Este gobierno de incapaces, que busca seguir gozando de las comodidades y el boato del poder hasta julio del 2026, ve peligrar esos planes debido al descontento popular y ha decidido culpar de todo a la prensa, que solo cumple con su misión de informar. Están con la sangre en el ojo y buscan venganza. No es gratuito que la mandataria salga de manera reiterada a hablar de ‘informaciones tendenciosas’ y ‘fake news’. El término ‘terrorismo de imagen’ que utilizó hace poco nadie lo entiende bien, pero lo hizo para referirse a lo que ella califica como ‘noticias falsas’. Lo mismo hace su premier, que el último miércoles habló de ‘terrorismo de imagen’ de quienes buscan ‘distorsionar la verdad’ y generar un ‘clima de inseguridad’. Y desde el vergonzoso Congreso, Waldemar Cerrón señala que hay medios de comunicación que ‘causan zozobra’ y cometen ‘actos terroristas de prensa’. El gobierno, en contubernio con el Parlamento, está en una nueva arremetida contra la prensa.
EL CONGRESO REPUDIADO: Gran número de expertos en leyes exige la derogatoria de la cuestionada ley del crimen organizado que, a su entender, afecta la labor de la Fiscalía en su lucha contra las bandas delictivas. En las protestas varias personas están pidiendo lo mismo pero, mientras tanto, desde el Legislativo los defensores de dicha norma señalan que no beneficia en nada a los hampones. Si es verdad, deberían salir a aclarar los alcances de la ley y sus limitaciones. Pero la población tiene derecho a sospechar de este Parlamento plagado de impresentables que se roban el sueldo de sus trabajadores, le sacan la vuelta al Estado de mil maneras para llenarse los bolsillos y encima sacan leyes que los benefician a ellos y a sus familiares, y jefes de partidos metidos hasta el cuello en procesos legales. Apago el televisor.