Este Búho está convencido de que el destino es circular y todo cae por su propio peso. Hace unos días escribí que ese siniestro personaje llamado ‘Chibolín’ terminará muy mal. Durante años está envuelto en aguas malolientes como pez en el agua. Y con una gran impunidad. Ahora se sabe de sus vínculos con fiscales y jueces. Esas voces que pretenden ‘pintarlo’ como el personaje ‘exitoso’ que es envidiado porque ha alcanzado un alto nivel de vida no se lo cree ni un bebé de pecho.
Y esto también alcanza a sus hijas ‘influencers’, que visten Prada, Gucci, Dior y manejan autos de doscientos mil dólares en Estados Unidos. Pero lo alucinante del caso es que Andrés Hurtado es nada menos que ‘apoderado’ del narco ‘Vaticano’, tal como lo reveló ‘Cuarto poder’.
Ingreso al túnel del tiempo. Demetrio Chávez Peñaherrera, ‘Vaticano’, el ‘Pablo Escobar peruano’, salió de la cárcel en 2016 después de 22 años de merecido encierro. Cuando dejó la prisión ya no era el narcotraficante que acusó a Vladimiro Montesinos, en una audiencia pública, de haberle cobrado durante más de un año cincuenta mil dólares mensuales para dejarlo operar sin problemas en Campanilla.
“‘Capulina’ (militar al que le entregaba el dinero para el ‘Doc’) se apareció en mi celda. ¡Me han amenazado, ya no voy a declarar. Me retracto, no dije nada!”. Ese fue el primer Demetrio Chávez que vi. “Lo han torturado en la Naval”, señalaban los periodistas. Montesinos podía sonreír satisfecho. La crisis política que podían haber generado las acusaciones de ‘Vaticano’, después plenamente comprobadas, se habían diluido gracias a interrogatorios ‘científicos’ y a la actuación protagónica de la fiscal de la Nación, Blanca Nélida Colán, madrina de Samantha, hija del ‘Doc’.
Tiempo después, en la Base Naval, una comisión nombrada por el mismo gobierno de Fujimori investigaba los vínculos de Montesinos con el narcotráfico, y el fiscal Tony García Cano llegó a entrevistar a ‘Vaticano’. Esa tarde, el capo lanzó frases de antología: ‘Vladimiro Montesinos es más narcotraficante que yo. Él es el verdadero Pablo Escobar. ¡Quiero hablar!’. Y habló. Contó que en 1990 construyó la más grande pista de aterrizaje en la propia Marginal, en Campanilla, con una inversión de 400 mil dólares.
“Pero un sorpresivo operativo desde la base antidrogas de la Policía en Santa Lucía, a cargo del coronel Gustavo Ríos Pita, destruyó por completo mi pista. Estaba desolado y pensé irme de allí, pero el capitán del Ejército, ‘Capulina’, me dijo que conocía en Lima a una persona muy influyente en el gobierno, el brazo derecho del presidente, Vladimiro Montesinos. Hablé con él y me dijo que siguiera operando. Mis contactos en Santa Lucía me informaron que Ríos Pita había viajado a Lima. Creyó que lo llamaban para darle un ascenso. Pero le informaron que lo relevaban del mando. Montesinos cumplía”.
‘Vaticano’ terminó traicionado por el ‘Doc’
‘Vaticano’ terminó traicionado por el ‘Doc’ y el valiente coronel Gustavo Ríos Pita vio destruirse su carrera. Durante años el ‘narco’ se enfrentó con los terroristas de Sendero Luminoso por el control de la zona. Dijo que, en Campanilla, se vengaba de los senderistas que atacaban su campamento: “Si agarraba a uno, lo barnizaba con miel de azúcar y le echaba decenas de hormigas isula, de tres centímetros. Son venenosas, pero no mortales. Su picadura se siente como si te atravesara un proyectil”.
En el 2011, una periodista del diario ABC de España entrevistó a ‘Vaticano’ en su celda y este, dibujando en su mente el día que dejaría la cárcel, le dijo: “Quiero salir en dos helicópteros con varias anfitrionas. Me encantaría aterrizar en el hotel Westin —el más alto de Lima— y filmarlo todo”. Al salir de prisión se hizo humo. Ahora me entero de que cedió todos sus poderes a ‘Chibolín’. Esta historia recién empieza y muchos deben estar temblando. Apago el televisor.
MÁS INFORMACIÓN: