Este Búho siguió por televisión la Santa Misa desde la Catedral en homenaje a los miles de fallecidos por el coronavirus y me impresioné con las impactantes fotografías de los finados que llenaban la Basílica. El sacerdote no estuvo solo, las almas de esos peruanos infortunados que cayeron por culpa de este virus traicionero y mortal estuvieron a su lado. Reconfortado espiritualmente redacté estos ‘pastillazos’ que tanto reclaman mis lectores.
CALLADITO SE VE MÁS BONITO: El presidente Martín Vizcarra escuchó a quienes le aconsejaron que deje de dar sus conferencias diarias, no solo por caer en la sobreexposición, sino porque manejaba mal las cifras de la pandemia, al hablar de que ya llegábamos a la ‘meseta’ y ‘las cifras iban a bajar’. Al final, en vez de meseta, la ‘curva’ parecía el monte Everest por el alza del número de contagiados, que hasta el domingo llegó a más de 225 mil y los decesos a 6 mil quinientos. Ahora anuncia que dará conferencias para casos puntuales y se olvidará de sus ‘clases de geografía’, que hacían poner rojos de vergüenza a los profesores de ‘Aprendo en Casa’, con su ‘meseta irregular’. El pueblo merece que el presidente le hable con realismo y no con falsos optimismos que solo confundían a la gente y la incitaban a quebrar la ‘cuarentena’, aún más de lo que está.
590 DÍAS, UNA ETERNIDAD: En una reveladora entrevista con Trome, el doctor Ernesto Bustamente, quien fue jefe del Instituto Nacional de Salud, sostuvo que en estos tres meses quedó demostrado que la estrategia del gobierno contra la epidemia fracasó y debería cambiarse. El biólogo molecular fue el primero en criticar las ‘pruebas rápidas’ utilizadas al inicio porque no diagnosticaban directamente los contagios y le pareció inaudito que nunca hubiera una política de rastreo del entorno de los infectados para aislarlos y así evitar más contagios. ‘Solo se hizo un seguimento y rastreo al paciente ‘cero’ que llegó de Europa, el piloto o copiloto’. El especialista sentenció que en el país nadie puede quedarse 90 días en su casa y que la cuarentena ya colapsó, porque el gobierno no entendió que el 70% del Perú es informal. ¿Dónde están esos ‘genios’ que asesoran en Palacio?
TODOS SE VUELVEN INFORMALES: El alucinante ‘desborde ambulatorio’ que empezó en Gamarra y se extiende a toda La Victoria, con la consecuente represión, lo iniciaron los vendedores minoristas que ofertaban mascarillas, gel, alcohol, medias y caramelos, porque ya no podían quedarse en su casa al no tener para la comida diaria. Luego se les unieron los ambulantes de ropa de invierno, que vendían la producción de las tiendas cerradas del emporio. Y después los propios dueños de las tiendas y talleres que sacaban su mercadería en triciclos y camionetas, porque aseguran: ‘Ya perdimos la campaña del Día de la Madre y podemos perder la de moda de invierno, y de Navidad y Año Nuevo’. Desde hoy se reactivarán los negocios de Gamarra, Polvos Azules y Mesa Redonda, Las Malvinas y Triángulo Grau, pero ‘a puertas cerradas’. Hay que apoyar la Fase 2 de la Reactivación Económica y la reapertura de Gamarra y otros centros comerciales que empezará mañana. Eso sí, respetando los protocolos sanitarios dictados por las autoridades.
¿Y LOS OTROS ‘RICHARD SWING’?: Este columnista considera que el escándalo desatado por el ‘criollo’ que llevó una patética función circense al Congreso, donde el susodicho y los congresistas compitieron al mismo nivel para ganar el aplauso de la platea, es solo la punta de un iceberg sobre cómo se despilfarra el dinero de los peruanos cuando los organismos públicos contratan ciertas ‘asesorías’. Lo de este ‘gelatinoso’ individuo fue más rochoso porque cobró 175 mil soles ¡con seis ministros! y 30 mil de ellos estando ya en plena emergencia, cuando la gente se moría de hambre. Pero ¿ya nadie se acuerda cuando otro ministro, al que le gusta hablar de ‘anticorrupción’, fue cuestionado en un programa periodístico por contratar ‘jugosas’ y prescindibles ‘asesorías’ y convenios con empresas de sus amigotes y los ‘colocaba’ en varios ministerios? Lo cierto es que ‘Swing’ hizo el mismo abuso de compadrazgo y sabe quién ‘de arriba’ le direccionó su contratación con los ‘amigotes’, pero como el ‘criollo’ es ‘resinoso’ e impresentable, le caerá la hoguera mientras los otros ‘comechados’ del Estado seguirán pasando piola.
Apago el televisor.