Incendio en Las Malvinas: El 'Búho' está indignado por esta tragedia

Este Búho se solidariza con los familiares de las víctimas del dantesco incendio en Las Malvinas. Pero abro mis ojazos por la indignación de ver que aquí, en mi país, por negligencia, por abuso de autoridad y por burlar las leyes, muere gente humilde y nadie resulta responsable. Cuando se produjo el incendio de la discoteca ‘Utopía’, donde fallecieron 29 jóvenes de familias acomodadas, el gerente Percy North y el barman que inició el fuego purgaron cárcel, pero hasta ahora la justicia pide la extradición de los dos dueños que huyeron como ratas a Miami. ¿Alguien fue a prisión como responsable del incendio en Mesa Redonda, donde los muertos y desaparecidos sumaron alrededor de quinientos? Nadie. 

¿Hay algún detenido por el Ejército o dieron de baja al oficial que ordenó que todo el batallón se metiera con uniformes y botines a la peligrosísima playa ‘Marbella’, causando el ahogamiento de cuatro soldados? El oficial ni siquiera acudió a la reconstrucción de la tragedia. Me parece que en el Perú no todos los ciudadanos tienen los mismos derechos. El incendio en Las Malvinas se inició en una zona con material inflamable y se extendió a los pisos superiores, donde la empresa ‘JPEG’ prestaba servicio de almacenamiento en estructuras de acero semejantes a contenedores. Por las nulas medidas de seguridad adoptadas por esta empresa, la municipalidad, el 9 de junio, procedió a clausurar todos los pisos superiores, donde funcionaban esos ‘contenedores’.

¿Qué hicieron los sinvergüenzas del gerente y representante de la compañía? Se burlaron de la ordenanza municipal y continuaron operando clandestinamente. A los infortunados trabajadores atrapados en el incendio en Las Malvinas los hacían laborar bajo candado, encerrados y con poquísima ventilación. Así lo relató la madre de una víctima, quien dijo que su hijo llamó desde su celular a su cuñado. ‘Hizo señas por la ventana y llamó dos veces. La última vez, dijo: ‘¡Cuñado, haz que nos saquen, estamos encerrados, el gringo nos puso candado, ya está llegando el humo!’’. El muchacho seguramente falleció asfixiado. Los testimonios recogidos por los reporteros durante la tarde y noche del jueves eran desgarradores. Los jóvenes, incluso menores de edad, solo podían ir al baño a la hora del almuerzo y de allí aguantarse hasta la noche, a la salida. 

Los horarios eran de doce horas y la paga sin boleta ni seguro social. ‘Mi hijo me dijo que los encerraban por temor a que roben la mercadería’. Pero parece que también lo hacían para evitar los controles del Ministerio de Trabajo. El propio presidente PPK se mostró indignado: ‘Tenían a los trabajadores como esclavos, es un acto criminal, terrible’. La municipalidad tiene identificados al gerente y al apoderado de la siniestra empresa en el incendio en Las Malvinas, y aseguran que los denunciarán penalmente. Si hay justicia, estos empresarios deberían pasar varios años tras las rejas. Pero los comerciantes piden que se capture al ‘capataz’, al ‘verdugo’ de la empresa, un tipo de tez blanca y cabello castaño al que solo se le conocía como ‘El gringo’, que fue visto merodeando a la hora en que se produjo el siniestro y después se hizo humo. 

Esta tragedia del incendio en Las Malvinas me recuerda la última película que vi sobre esclavos, la de ‘Django’, de Quentin Tarantino. También ‘Titanic’, cuando en pleno hundimiento del barco, el jefe de los marineros ordena que no abran las puertas de los camarotes de tercera y cuarta clase, para que los de primera puedan abordar con tranquilidad los botes salvavidas. Estaremos alertas para que esta vez sí haya justicia. Apago el televisor.