El Rolex de Dina, Congreso de la vergüenza y la inseguridad ciudadana, en Picotitos de El Búho

Este Búho ve el panorama político más movido que Kike Suero luego de despedir el verano en la playita con una trepadora y dulce cachina chinchana. Por eso, agarro mi ‘Espada del augurio’ de los ‘Thundercats’, para que me permita ver ‘más allá de lo evidente’ y así dar estos ‘Picotitos’ bien picantes, come les gusta a mis lectores.

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EL ROLEX DE DINA: Realmente es una cachetada a la pobreza que la presidenta Dina Boluarte se luzca en actos públicos con un Rolex cuyo precio superaría los 50 mil soles. Estos relojes de alta gama parecen ser la debilidad de los líderes de la izquierda cuando llegan al poder, como Evo Morales, Hugo Chávez, Nicolás Maduro, Cristina Fernández y tantos otros.

Ahí se les olvida el discurso de odio a todo lo que sea capitalismo. La falta de empatía de la mandataria sin duda golpeará aún más su alicaída aprobación ante los peruanos. Y aquí no puede decir que es su vida personal.

Al ser la primera servidora de la Nación, por una cuestión de transparencia, la señora tiene la obligación de demostrar cuándo y dónde lo compró. ¿O es un regalo a cambio de una licitación a dedo?

LA INSEGURIDAD ASESINA: La clamorosa incapacidad de este gobierno para frenar la terrible inseguridad ciudadana y dar solución a la crisis económica son dos de los principales motivos por los que gran parte de la gente desaprueba a la presidenta. Esa es la lectura que Urpi Torrado, gerenta de la encuestadora Datum, dio ayer en entrevista con Trome.

Comentó que en Lima el 91 por ciento de las personas se siente insegura en las calles. Es una cifra de escándalo. Prácticamente nadie se siente a salvo, excepto las autoridades públicas que cuentan con circulina y escolta policial. A ellos sí no les pasa nada. Pero el bodeguero, el mototaxista, el ama de casa, el empleado y cualquier otra persona temen ser asesinados por un celular.

CONGRESO DE LA VERGÜENZA: Salvo honrosas y escasas excepciones, hay que decirlo, este Congreso está lleno de impresentables ‘mochasueldos’, radicales, burros, ignorantes, acusados de asesinato y hasta violadores. Es lo peor que le pudo pasar al país. De los doce parlamentarios denunciados por robarles el sueldo a sus trabajadores, solo una ha sido sancionada, María Cordero Jon Tay.

El resto sigue impune, pese a que la primera acusación se conoció hace un año. Y hay que decirlo clarito: Aquí los de izquierda, centro y derecha actúan igual cuando se trata de acomodarse y exprimir al Estado todo lo que se pueda.

LA REPOSICIÓN DE RAFAEL VELA: En redes veía cómo los ‘caviares’ celebraban que el Poder Judicial haya ordenado la reposición provisional de Rafael Vela como coordinador del Equipo Especial Lava Jato y de la Fiscalía de Lavado de Activos.

El cuestionado fiscal había apelado el fallo de la Autoridad Nacional de Control del Ministerio Público, que lo suspendió ochos meses y 15 días por cuestionar a los jueces que liberaron a Keiko Fujimori. Pero me pregunto hasta qué punto beneficia esa reposición al país, cuando la actuación de Vela y de José Domingo Pérez ha sido duramente criticada por diversos expertos, quienes señalan que favorecieron a Odebrecht de manera escandalosa.

JORGE SALAS ARENAS Y ANTAURO: Este columnista sigue sin entender la facilidad con que el presidente del Jurado Nacional de Elecciones da ‘luz verde’ a la inscripción del partido político del asesino de policías Antauro Humala.

Si Pedro Castillo destrozó al Estado en año y medio, no quiero ni imaginar lo que haría el ‘fumeque’ desde el sillón de Pizarro. Pero el colmo es que ninguna institución del Estado se pronuncia sobre las graves decisiones de Salas Arenas. A otros partidos se los bajó por muchísimo menos. Muy raro. Apago el televisor.

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