Este no se sorprendió de que en el Congreso, con mayoría de Fuerza Popular, después de dos días de guerra verbal contra la ‘cuestión de confianza’ que les envió el Ejecutivo, hayan votado como mansos gatitos para otorgarle el referido ‘espaldarazo’. Claro, no era amor al chancho, sino a los chicharrones. La mayoría de ‘otorongos’ votó con el estómago, por su suculento sueldo, sus oficinas, empleados, aguinaldos y gastos por representación. Y los que votaron en contra, lo hicieron por un puro cálculo político. Un veterano y avispado cronista parlamentario, que cubrió épocas de oro en las cámaras de senadores y diputados, sentenció: ‘Calificaron a esta confrontación como un ‘Juego de Tronos’, pero parecía que en Palacio, el rey en vez de sentarse en un ‘trono de hierro’, lo hacía en uno de lata’.

Y sus rivales del Legislativo, con varias damas de Fuerza Popular, que se creían ‘reinas de dragones’, más bien parecían ‘reinas de culebras’, ya que de su boca no brotaba fuego, sino sapos y culebras irrespetuosos hacia el Gobierno y el mismísimo Vizcarra. Pero anécdotas aparte, aquí hubo dos ganadores pírricos: El mandatario y su premier. Y un estruendoso y derrotado Fuerza Popular, con otros grupos políticos como las izquierdas y el Apra, que entraron en un siniestro juego propio de jalar agua para sus molinos. Paso a explicar esta ‘resaca de la confianza’ con mis fieles lectores.

‘PANTALEÓN’ BAILÓ CUMBIA: El Ejecutivo nunca pensó en realidad en ‘disolver’ el Congreso. Ese escenario era ilógico, porque el remedio podía ser peor que la enfermedad. ¿Se imaginan unas nuevas elecciones y tal como está de harta la ciudadanía con los actuales congresistas, que entren al Parlamento las hordas etnocaceristas de Antauro Humala, los ‘atilas’ de ‘Goyo’ Santos, Vladimir Cerrón y del ‘Nerón’ Walter Aduviri, que casi incendia todo en su ‘Aymarazo’? No, frente a ellos, los Mulder o Becerril son ‘bebés de pecho’. Lo que buscaban -y lo consiguieron- era golpear y fraccionar a la ‘blindacorruptos’ mayoría de Fuerza Popular y, de paso, romper su pacto de sangre siciliano con la cazurra célula parlamentaria aprista. Consiguieron impulsar una reforma que ojalá no se la dejen desvirtuar por esos ‘otorongos’ que temen perder la inmunidad y quieren seguir reinando en partidos antidemocráticos y corruptos que reciben dinero de las mafias. Ojalá sí que les haya quedado claro que las reformas por sí solas no van a cambiar las cosas si el Gobierno sigue paralizado en otros temas vitales para el ciudadano de a pie.

FUERZA PERDEDORA: Fueron los grandes derrotados de la jornada. Perdieron por goleada, se les fueron públicamente y con roche dos congresistas más y se partieron como enemigos en una votación que vio todo el Perú. En esa, a diferencia del Apra y la izquierda, se demostró que en el fujimorismo lo único que los unía era el afán de estar en una bancada mayoritaria para tener un cargo en una comisión, hacer lobbies o ‘blindar’ corruptos. Antes sí decían ‘chicheñó’ a las órdenes del chat ‘La Botica’, pero cuando una alucinada Yeni Vilcatoma, un resentido Luis Galarreta o una poseída Rosa Bartra les exigieron votar en contra, los mandaron a rodar. Los ‘Keikistas’, encabezados por Luz Salgado, inclinaron la balanza a favor del Ejecutivo con 33 votos, que como les digo, no es amor al chancho, sino a los chicharrones. Muchos en la bancada fujimorista ‘invirtieron’ comprándose un puesto en la lista y quieren ‘recuperar su inversión’ terminando su tiempo de representación. Ahora se verá un radicalismo pequeño, pero furibundo, y con ánimo de venganza y podrán poner obstáculos en vez de apoyar los proyectos del Ejecutivo.

LAS IZQUIERDAS Y EL APRA:
Ambos tuvieron un juego político propio. El Frente Amplio y Nuevo Perú están en campaña hace meses. Verónika Mendoza coquetea con ‘Goyo’ Santos y Cerrón para que la ayuden en las elecciones del 2021. Ha vuelto a apoyar a Nicolás Maduro y esperaba una disolución del Parlamento para estrenar su alianza en las elecciones al congreso extraordinario en diciembre. Mientras tanto, los apristas reafirmaron su cohesión como célula parlamentaria y le demostraron a Fuerza Popular lo que significa disciplina partidaria. Claro, todos sabían de antemano que la propuesta del Ejecutivo iba a triunfar, pero hicieron una votación para ‘la tribuna’. Se las saben todas.

Apago el televisor.

tags relacionadas

NOTICIAS SUGERIDAS

Contenido GEC