Este Búho se imagina que por un día los controvertidos políticos se convierten en afamados chefs y cocinan platillos que los identifican. Alan García se lució con su chancho al vino ‘Don Bieto’ con ensalada de palta de la chacra de Facundo Chinguel, con harto vinagre ‘Luyo’. Kenji sorprendió con unos chicharrones de alpacas puneñas de su amigo ‘Mamani Bond’. Keiko y su inseparable Joaquín ‘Cobrador de combi’ Ramírez asombraron con un plato brasileño de feijão carioca bien ‘lavadito de activos’ con harto tocino alemán Odebrecht. Ollanta y Nadine se pulieron con unos potajes de la tierra de su ídolo Hugo Chávez; es decir, plátano frito podrido, perdón, ‘Maduro’, con arepas rellenas de ‘uñazas’ de cangrejo en salsa chavista y una jarra de tizana con agua estancada del río Huaycoloro, bien sazonada y con aguardiente ‘canero’ preparado por Antauro. Hay para todos los gustos y se les hará agua a la boca con estos ‘piqueítos’ que tanto reclaman mis lectores.
HECHOS Y NO PALABRAS: Este Búho escuchó atentamente la exposición del premier César Villanueva y uno no puede estar en contra de sus propuestas para la lucha anticorrupción, con medidas como la muerte civil para funcionarios corruptos o la bancarización obligatoria para los partidos políticos. Pero creo que muchos congresistas han sentido que pueden apoyar esas iniciativas con recelo, porque desde que llegó Martín Vizcarra a Palacio, como que hay una fuerte influencia del fujimorismo en el Gobierno y estos fueron los más afanosos para anunciar que apoyarán al Ejecutivo. Algún ministro con pasado montesinista y varios visitantes de siniestros antecedentes con la corrupción, que rondan asiduamente Palacio y la PCM, me hacen desconfiar.
CUIDADO CON LOS CANDIDATOS: En octubre próximo serán las elecciones de alcaldes y gobernadores regionales y a este Búho le llama la atención la tremenda cantidad de letreros y costosísimos paneles que ya comienzan a inundar la ciudad. ¿Tan buen negocio es convertirse en burgomaestre? Cuidado. Ya hemos tenido casos de alcaldes que no solo entraron a robar a ciertos municipios, sino que, ¡como si fuera poco!, se aliaron con sanguinarias bandas criminales con las que cometieron delitos tan terribles como el sicariato. Si no queremos equivocarnos, hay que estudiar bien al candidato al que pensamos darle nuestro voto.
CUIDADORES DEL DIABLO: Así se sintió este columnista cuando vio cómo el 1 de mayo desfilaban las bases camufladas de Sendero Luminoso y del Movadef por el Centro de Lima, muy bien custodiadas por los efectivos de la Policía Nacional. ‘Obreros’ como el abogado de Abimael, Alfredo Crespo; el de Osmán Morote, Raúl Bonnel, y conspicuos terroristas de Sendero Luminoso que estuvieron presos por asesinato marchaban mientras se volanteaban panfletos “defendiendo la vida del presidente ‘Gonzalo’”. Cómo se habrán sentido los miles de familiares de efectivos de las fuerzas del orden, funcionarios del Estado, políticos, campesinos y empresarios civiles en general, muertos por la insania terrorista. ¿Qué dirá de esta afrenta el nuevo ministro del Interior?
¡UBÍCATE, OLLANTA!: Cualquier extranjero que no conoce nada de la historia del país y escucha los discursos de Ollanta Humala cuando dejó la prisión, creería que es un expresidente democrático salido de las mazmorras de un gobierno golpista, como el venezolano Rómulo Gallegos, o el de un luchador mundial contra el racismo y la discriminación, al mismo modo del gran Nelson Mandela. Así habla Ollanta, como si su encarcelamiento fuera por un hecho político. ¡Por favor! El nacionalista fue a parar a prisión acusado de un vulgar delito como el de, en sus tiempos de candidato presidencial, chapar junto con su esposa dinero sucio de la corrupción chavista en el 2006, y tres millones de dólares de la ‘más grande corruptora do mundo’, Odebrecht, para su campaña del 2011. También por otros millones que terminaron en su cuenta y los recibió Nadine en persona, según declaraciones de testigos. Apago el televisor.