Del saque somos carnecita... Ya me contaron que el zambito que le aplaude todos los chistes al ‘10’ que ya se jubiló no se cansa de meterse en problemas. Entró con todo al negocio de llevar chibolos a equipos en ligas de ascenso y dicen que por su recomendación pide entre ocho y diez ‘lucas’ cholas. Lo malo es que solo consigue que entrenen una semana, después los echan y el ‘man’ se desentiende del tema. Hay dos papás que manejan sus fichas que apostaron por su apoyo y ahora lo están buscando con su ‘personal’ para ‘hablar’ face to face. Guarda ahí...
Me datean que un ‘Chaval’ aún no agarra su mejor estado físico para jugar en su nuevo club, pero está en su mejor momento para las travesuras. Las malas lenguas cuentan que desde que regresó al país ya tiene ‘amiguitas’ que lo exigen y hacen sudar más que su preparador físico. Con razón nadie se explica cómo llegó a un ‘grande’ después que no la hizo en los últimos equipos donde estuvo. Hummmm...
El que anda ‘patrullando’ por la avenida La Marina es el ‘Loquito del Rímac’. El fin de semana lo vi con un material de respeto, hablando de lo lindo, portándose elegante y con modales en la panadería La Mansión del Pan por Las Torres de la Huaca de San Miguel. Parece que es un nuevo descubrimiento del exarquero, porque dicen que la chibola no es conocida ni en redes ni en salsotecas. Lo mejor de todo es que ella aún no descubre la ‘aldea de pitufos’ que se maneja. Quéeeeee...
‘Tiviritávara’ cambió para bien
‘Tiviritávara’ es otro desde que se enteró de que nuevamente será papá. Hace unos días hizo el baby shower y luce de lo más feliz. Dicen que ni la charla del ‘Prosor’ ni el floro del ‘Diamante’ lo hicieron cambiar. Solo cuando se enteró de que llegaba su nuevo heredero cambió para bien. Ahora es más profesional y es el primero en llegar a entrenar y el último en irse. Vale... Me voy, soy fuga.
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