Del saque somos carnecita… La firme que hay dos referentes de la selección que no pasan por buen momento. A Carlos Zambrano le sobra calidad, pero estar inactivo, sin ritmo, le cuesta, no tiene la misma reacción y anticipación que es su fuerte. Además, muy temprano lo condicionan con la amarilla y es un aspecto en que había mejorado una barbaridad. Los delanteros de Sudamérica y el mundo lo respetan. Pero hay que decir las cosas tal y como son. Ha salido en la foto de los goles con Ecuador en Nueva Jersey, con Uruguay en Montevideo y Lima. Y en sencillamente por falta de competencia. Tiene que hacer algo para que lo pongan en Ucrania, donde todos los defensas juntos de su equipo no le llegan ni al tobillo. Otro que no anda fino es Paolo Guerrero. No sé si por la edad, cansancio por la cantidad de partidos en su club, el sistema de Gareca, los compañeros que tiene al lado, pero lo veo lento, sin chispa, renegando, falto de fuerza y ha perdido el olfato goleador. No la mete en el Inter ni con la ‘Blanquirroja’. Me tranquiliza que los dos en forma son de lo mejor en el continente. Pero se tienen que poner las pilas ya. Sí, señores...
Ya me contaron que un arquero de un equipo grande y de selección anda mandando mensajitos a una modelo morena. Ella le dijo que pare porque su pareja ya sabe, pero él ahora se baraja enviando frases motivacionales. Que tenga cuidado porque me han pasado la voz de que ya están llamando a unos muchachos que le pueden romper los dedos. Qué palta…
Así que ese defensa que se llama como un salsero y juega en el Callao anda vendiendo imagen en las redes sociales. Dizque cuando conoce una extranjera por el Facebook coloca su foto con una aplicación, donde sale con ojos verdes. Después les mete harta letra y la verdad es que que frente a frente no pronuncia más de dos palabras y está chancadito, al debe. Y no va ser…
Buen corazón el de ‘orejas’. Ayudó a un nido de Comas, también se portó con un colegio sufridito y con la comisaría de la Mujer de Collique, el barrio donde nació y creció. Silencioso y sin hacer bulla se apareció con hartos útiles y juguetes adelantando la Navidad. Vale…
El que ya no regresa a su equipo es un zambo de la selección. Aterrizó en Lima porque su club quedó eliminado hasta el otro año. Se le vienen varias semanas de vacaciones y agárrense. Ahorita, con urgencia, que el ‘Tigre’ lo obligue a entrenar solo en la Videna y prohibido dejar en su casa encartes de tiendas donde vendan trago en oferta, que después se entusiasma. Que recuerde que tiene la calidad para ser titular en la selección. Que no sea sonso. El tren le ha pasado por segunda vez y que se suba, no lo deje ir. Así es... Me voy, soy fuga.
NOTICIAS SUGERIDAS
Contenido GEC