En Juliaca no le tenían confianza a Javier Arce. Ahora que están cerca de ganar el Apertura como locos quieren renovarle

Del saque somos carnecita... Ya me contaron que el mal momento que se vive en el club del final de la avenida Javier Prado no es casualidad. Todo tiene que ver con la maleteada del chileno a los más chibolos del equipo, culpándolos de las derrotas. Los más experimentados le pusieron la cruz porque les tiró la hinchada encima y ahora el grupo está partido. Por lo bajo dicen que tiene en su currículo haber bajado con otros equipos, pone una cara en el camarín, pero con la prensa es otro. Por eso ya tiene los días contados y solo se espera que asuman los nuevos administradores para meterle una patada en las cuatro letras. Asuuuu...

El chalaco es palomilla, avispado, pendenciero, bravo, le sobra calle, y por eso hasta ahora no entiendo como los ‘santos’ le empataron a los rosados, que se dejaron sorprender esperando que cumplan con el ‘Fair Play’. Si mi equipo se está jugando la baja, lo más importante es ganar porque defiendo mis frijoles, mi orgullo y debo estar concentradito los 90 minutos y más que dure el partido. Los giles a otro lado. Así es...

La firme que los directivos en nuestra pelotita se mueven al revés. En Juliaca solo le hicieron contrato por medio año al técnico que está haciendo tremendo campañón. Parece que no le tenían confianza a Javier Arce y solo lo ficharon para ver qué pasaba hasta traer a otro. Ahora que están cerca de ganar el Apertura están como locos por renovarle al técnico, que con todo derecho está pidiendo un aumento. Estoy seguro que si era un extranjero fácil le hacían contrato por dos años, le ponían auto, casa y un sueldazo. Qué feo... Me voy, soy fuga.