Este Búho regresó recargado luego de disfrutar un sol esplendoroso en Lunahuaná, degustando un sabroso chupe de camarones. Por eso, les presento estas ‘Pastillitas’ bien picantitas que tanto reclaman mis lectores.
– INDULTO QUE TRAE COLA: Cuando hace más de dos años el presidente Ollanta Humala le negó el indulto a Alberto Fujimori , que según sus hijos padecía cáncer, el nacionalista se amparó en el informe de la Comisión de Gracias Presidenciales, que desestimó la gravedad de la enfermedad. Ante esto, el fujimorismo le declaró la guerra al gobierno, que acabó con la oposición presidiendo el Congreso. A cinco días de terminar su gobierno, otra vez Fujimori solicita el indulto. Aparentemente, lo que se busca es poner entre la espada y la pared al presidente electo PPK para que, en su mensaje presidencial, anuncie el indulto ‘en aras de la reconciliación’.
Los fujimoristas se han hecho los locos y dicen que ‘no sabían’ nada. Pero hábilmente Pedro Pablo no ha pisado el palito y le ha tirado la pelota al Congreso para que dé una ley de arresto domiciliario a presos ancianos y con enfermedad grave. Aunque hay un runrún que la presión sería a Ollanta, para que lo suelte, a cambio de poner ‘paños fríos’ en las investigaciones futuras a su gobierno y a Nadine, pero de pasadita el mandatario saliente indultaría también a su hermano Antauro. Como diría la gran Cristina Saralegui, ¿será cierto eso?
– PLAGIO COMO CANCHA: César Acuña protagonizó un vergonzoso caso de plagio y por ello su candidatura presidencial se fue por un tubo. Se adueñó del libro del profesor Otoniel Alvarado con premeditación, alevosía y ventaja. No fue su única apropiación ilícita de trabajo intelectual ajeno, pero sí la más sonada y que está en el Poder Judicial. El mismo Acuña después sostuvo que no fue un plagio, ‘sino copia’. Según el Código Penal, aseguran los especialistas en Derecho, por este delito le correspondería una prisión efectiva de cuatro a ocho años. Lo increíble es que el protagonista de este caso es dueño de universidades. Patético.
– UN ‘GRINGO’ EN PALACIO: Dentro de unos días, PPK recibirá la banda presidencial. La mayoría del país nunca imaginó que un tecnócrata de apellido impronunciable podría llegar a ganar las elecciones democráticamente en un país donde, al inicio de su campaña, la mayoría de la población rural, cuando llegaba, creía que era un funcionario de la Embajada de Estados Unidos.
Además, a sus 77 años, parecía un salto al vacío, pero logró una proeza que es admirada por otros mandatarios de la región. El Perú espera que cumpla sus promesas. Combatir la inseguridad ciudadana y reducir la pobreza, dotar de servicios básicos de agua, salud y educación a las mayorías de menos recursos. Debe gobernar para todos los peruanos y eso tendrían que entenderlo quienes en el otro poder del Estado, el Congreso, pretenden ponerle zancadillas.
– REDES ‘PEPERAS’: En este mundo globalizado e interconectado por las redes sociales, hasta la delincuencia saca provecho de ellas. Antes, las ‘peperas’ eran mujeres que andaban en bares de luces rojas. Hoy, en Facebook, se ofrecen guapas jovencitas que confiesan querer conocer a un ‘millón de amigos’. Allí nomás recibían cientos de solicitudes de amistad y el cerebro de la banda, Jorge Aquino (29), ‘Coco’, analizaba y escogía a las víctimas. Sus carnadas eran ‘Rulitos’, una rubia veinteañera y su guapa hermana menor. Ahora ellas están presas. Pero el cerebro recién fue capturado y se descubrió que el miserable violaba a las chicas ‘pepeadas’ y se tomaba ‘selfies’ con ellas dormidas. Tengan mucho cuidado al conectarse con desconocidos en el ‘Face’. Apago el televisor.
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