Un hombre afrodescendiente pasó más 30 años tras las rejas por un crimen que no cometió. Ahora, estando en libertad condicional durante los últimos tres años, la justicia estadounidense ordenó su detención y encarcelamiento por haberle disparado a un hombre durante una pelea.
El caso de Edward Taylor dio un giro inesperado esta semana cuando un juez de Jacksonville, en Florida, ordenara su encarcelamiento con una fianza de más de un millón de dólares por intento de asesinato, señala KWTX.
“Esta es la primera vez que estoy llorando, pero amo a Edward. Y es posible que nunca lo vuelva a ver”, señaló entre lágrimas Agnes Anderson, su madre. Y es que su trabajo por limpiar el nombre de su hijo volvió al punto de partida.
“Fue algo hermoso que lo liberaran después de tanto tiempo, y todos estábamos felices y celebrando. Y luego (sucede) esto”, agregó Anderson.
Taylor fue arrestado luego que, el último viernes, le disparara a un hombre y huyera de la escena. Tal como revelaron videos de vigilancia obtenidas por las autoridades, grupos de hombres se enfrentaron en una pelea y hubo disparos.
“Él salió (de la cárcel), y no sé si se relacionó con las personas equivocadas con las que comenzó a salir o lo que sea”, dijo su madre.
Sentenciado por un crimen que no cometió
De 57 años, Edward Taylor fue encarcelado en 1986, acusado de haber abusado sexualmente de una niña de 4 años en Jacksonville.
Durante la denuncia, la menor, quien fue detectada con una enfermedad venérea después de ser ultrajada, señaló como el responsable al papá de su amigo, quien vivía al lado de ella. Sin embargo, nunca mencionó el nombre de Taylor.
En las primeras investigaciones, la menor culpó directamente a Edward, luego que la policía le mostrara fotos de él y su hermano, quienes vivían juntos. Estas imágenes no incluyeron el rostro de un tercer hermano identificado como Ithemas, quien luego se determinó que también vivía al lado, según la moción.
Taylor siempre se declaró inocente y los exámenes que le practicaron no mostraban síntomas de enfermedades preexistentes. Aun así, fue sentenciado hasta 2018, donde la víctima Stephanie McIntyre se retractó de su testimonio, lo que condujo a su liberación un año después.
Ahora, la mujer indicó que el culpable de haberla abusado cuando era niña era Ithemas, por lo que firmó una declaración jurada que lo confirma.
El sujeto ya había sido arrestado anteriormente por abusar sexualmente de otras cuatro niñas menores de 12 años en Brunswick, Georgia, y, coincidentemente, padeció una enfermedad venérea en 1986, según los registros.
“Me duele el corazón por mi hijo y lo amo mucho. Quiero que todos sepan que amo a mi hijo”, lamentó Anderson ante la prensa. “El es un buen chico. Algo lo despistó”, finalizó.