Un video de 33 segundos, publicado en las redes sociales, fue suficiente para que la justicia de Colombia abriera una investigación contra una jueza de Santander por mostrarse fumando en su cama y en aparente estado de ebriedad en medio de una audiencia penal.
La polémica en torno a Heidy Vivian Polanía Franco, abogada especialista en derecho constitucional, surgió luego de que un internauta filtrara y compartiera el extracto de una audiencia penal de Cúcuta, donde se observa el desarrollo de un proceso de manera virtual, detalla El Tiempo.
Sin percatarse que estaba con la cámara encendida, la letrada apareció acostada sobre su cama, con un cigarro en la mano y mostrando diminutas prendas, con algo similar a una ropa de baño.
La difusión de estas imágenes permitió que la Comisión Nacional de Disciplina Judicial de Colombia pidiera a la Comisión Seccional de Santander que investigue si la funcionaria incurrió en una falta disciplinaria.
“Le remito, por competencia, los informes publicados por diferentes medios de comunicación, relacionados con la presunta incursión en faltas disciplinarias por parte de la doctora Vivian Polanía, juez penal municipal con funciones de control de garantías de Cúcuta, con ocasión al contexto en el que desarrolló una audiencia virtual”, señala el comunicado.
Por si fuera poco, en 2020, Polanía Franco fue investigada, esta vez por la Sala Disciplinaria del Consejo Superior de la Judicatura del Norte de Santander, por el escándalo que desataron las imágenes de sus redes sociales y titulares de prensa donde se le calificaba como “la jueza más sexy”.
En ese entonces, el Consejo seccional de la judicatura de Norte de Santander señaló que se les recordaba a los servidores de los despachos judiciales “cuidar de que su presentación personal corresponda al decoro que debe caracterizar el ejercicio de su elevada misión”.
Vivian es abogada por la Universidad Católica de Colombia y se especializó en derecho constitucional en la Universidad del Rosario. Actualmente estudia una maestría en derechos humanos.
Con 34 años, la jueza se mudó a Cúcuta donde hoy funge como jueza de control de garantías y tiene a su cargo procesos de bandas criminales.
La abogada ha estado envuelta en varias polémicas desde el 2020, por las frecuentes fotografías que publicaba en ropa interior, enseñando sus más de 40 tatuajes y las rutinas de ejercicio en casa.
Polanía cuenta con más de 283 mil seguidores en Instagram en su segunda cuenta, porque la primera fue bloqueada. También ha recibido patrocinios de empresas norteamericanas por publicar sus marcas.
Contenido GEC