El gobierno de Venezuela anunció este lunes que no aprobará el uso en su territorio de la vacuna contra el coronavirus (COVID-19) de AstraZeneca por los supuestos efectos secundarios que han provocado que su aplicación fuese suspendida en varios países de Europa.
La vicepresidenta Delcy Rodríguez informó que “Venezuela no dará permiso a la vacuna AstraZeneca para ser utilizada en el proceso de inmunización de nuestra población en razón de las situaciones, las complicaciones, que se han presentado a quienes han sido vacunados”.
“El presidente Nicolás Maduro ha decidido, tomando en cuenta los informes técnicos (...), no aprobar y no otorgar licencia de uso de esta vacuna en el territorio venezolano”, agregó la funcionaria en una declaración televisada.
El país caribeño empezó en febrero su campaña de vacunación con la vacuna rusa Sputnik V, con el personal de salud y las autoridades como prioridad, y en marzo comenzó a aplicar también la de la farmacéutica china Sinopharm.
Venezuela tenía reservadas entre 1,4 y 2,4 millones de vacunas de AstraZeneca por medio del sistema COVAX de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Sin embargo, no habían podido llegar por deudas con la OMS.
Maduro ha pedido a la Organización Panamericana de la Salud (OPS) gestionar para la compra de vacunas la liberación de 300 millones de dólares de Venezuela bloqueados en el Banco de Inglaterra en medio de sanciones financieras, lideradas por Estados Unidos para tratar de forzar la caída del mandatario socialista.
La OPS anunció en febrero que enviaría a América Latina vacunas AstraZeneca y Pfizer.
Varios países de Europa han suspendido la vacunación con AstraZeneca, entre estos Francia, Alemania, España e Italia, por temor a coágulos sanguíneos u otros efectos secundarios.
La OMS insistió este lunes en el uso de esa vacuna, aunque anunció que sus expertos se reunirán el martes para analizar la situación.
Fuente: AFP