Sheila Seleoane fue una mujer de 61 años que falleció en el 2019, pero encontraron su cuerpo en febrero de este año. El cuerpo estuvo en tal grado de descomposición que las autoridades no pudieron investigar la causa de muerte.
Según “The Daily Mail”, la mujer falleció en su departamento y los residentes del edificio venían quejándose de un fuerte olor a finales del 2019. Sin embargo, la empresa propietaria del edificio no hizo nada para averiguar qué había pasado.
Es que nadie notó que la secretaria médica no vivía desde agosto del 2019 y ese fue el mes que se registró su última transacción bancaria.
Ian McDemott, director de la empresa inmobiliaria británica, Peabody Housing, afirmó sentirse mal por lo sucedido. “Nos hemos disculpado con la familia. Lamentamos profundamente lo ocurrido”, señaló.
¿Fue una negligencia de la empresa?
En el mes de septiembre del 2019, la persona que vivía abajo del apartamento de Sheila se quejó de la presencia de gusanos, moscas y un olor fuerte de putrefacción. Se contactó con la empresa y estos le contestaron que la empresa encargada del control de plagas no se hacía cargo de este tipo de pestes.
Luego, la empresa mandó varias notificaciones al apartamento de Seleoane por el olor, pero al no recibir respuesta decidieron cortarle el gas.
El ejecutivo confirmó que los protocolos para contactar a los inquilinos de Peabody Housing van a cambiar debido a la crisis que vivieron con la muerte de la mujer de 61 años.