¡Mundo enfermo! Rolando Ortiz de 37 años asesinó a su hijo de dos porque no lo dejaba dormir tranquilo. El crimen sucedió en La Villita. El pequeño resultó casi decapitado.
Ortiz, tras asesinar a su hijo, llamó a su esposa y no logró comunicarse con ella. Llamó a su cuñada y le contó que asesinó a su hijo identificado como Mateo García Aguayo. La mujer colgó de inmediato y llamó a un familiar, que vive en el primer piso de la vivienda, para que suba.
El asesinó logró escapar en su camioneta. Todo ocurrió el último viernes por la tarde. La policía llegó al lugar y encontró el cuerpo del pequeño metido en una bolsa de basura en la cocina.
Ortiz fue capturado por la policía de Illinois cerca de Kankakee. Sobre el asesino pesa el cargo de asesinato en primer grado.
"Mateo no tenía la edad suficiente para tomar una mala decisión, para tomar el camino equivocado en la vida", manifestó el superintendente de la Policía de Chicago, Eddie Johnson. "Solo era un niño inocente cuya confianza y seguridad fue traicionada por el hombre al que nunca se le debería tener que cuestionar: su padre".
Por su parte Brendan Deenihan, comandante de Detectives de Área Central, manifestó que Ortiz se sentía muy perturbado porque no podía dormir bien en la noche y asesinó al pequeño. "El bebé de 2 años corría y lo mantenía despierto, entonces, Ortiz lo llevó a la cocina y le cortó la garganta", manifestó.
"Cuanto Ortiz se dio cuenta que acaba de matar a su hijo, hizo un intento bastante débil de cortarse las muñecas, lo que finalmente resultó en un par de puntadas", manifestó Deenihan.
"Creemos que tenemos el arma homicida, creemos que fue un cuchillo de cocina, pero no está cien por ciento corroborado en este momento", dijo Deenihan.
"Obviamente es bastante difícil que al buscar en una bolsa de basura veas lo que vieron", sentenció el policía sobre el horrendo crimen en Chicago.