Washington. [EFE]. El Gobierno de EE.UU. urgió este domingo a los líderes de Armenia y Azerbaiyán a “cesar inmediatamente” las hostilidades en Nagorno Karabaj, que se disputan las dos naciones y que encierra el conflicto más antiguo del espacio postsoviético.
En un comunicado, el Departamento de Estado condenó “en los términos más fuertes” la escalada de violencia e indicó que el subsecretario de Estado de EE.UU., Stephen Biegun, conversó por teléfono con el ministro de Exteriores de Azerbaiyán, Jeyhun Bayramov, y con el titular de la misma cartera en Armenia, Zohrab Mnatsakanyan.
Biegun urgió “a ambas partes a cesar inmediatamente las hostilidades y usar las existentes vías de comunicación entre ellos para prevenir una mayor escalada, así como para evitar retóricas inútiles y acciones que aumenten aún más las tensiones sobre el terreno”, detalló el Departamento de Estado.
En una rueda de prensa en la Casa Blanca, un periodista preguntó sobre el asunto al presidente de EE.UU., Donald Trump, quien contestó: “Estamos mirando esto con mucha fuerza, acaba de ocurrir, y sé sobre ello, supe sobre esto hoy y ayer y lo estamos evaluando con mucha fuerza. Tenemos una muy buena relación en ese área, y vamos a ver si podemos pararlo”.
El mandatario, que pareció haber sido pillado por sorpresa, no dio más detalles sobre la posición de Washington sobre este tema.
El llamado al cese de la violencia de EE.UU. se une al de otros miembros de la comunidad internacional, como la Unión Europea y Naciones Unidas, que han pedido retomar el dialogo.
Armenia y Azerbaiyán se encuentran en estado de guerra desde 1991, si bien tres años después firmaron un alto el fuego, vigente hasta hoy día aunque con violaciones denunciadas por ambas partes.
La escalada en Nagorno Karabaj llevó a Armenia a decretar la ley marcial y la movilización general en todo su territorio, mientras que, horas después, las autoridades de Azerbaiyán firmaron también un decreto sobre la declaración de la ley marcial en todo el territorio del país a partir del lunes.
Las movilizaciones en Armenia y Nagorno Karabaj se producen después de que el Ministerio de Defensa de Azerbaiyán lanzara este domingo una “contraofensiva” en toda la línea de contacto en respuesta a los ataques que, asegura, Armenia efectuó a primera hora de la mañana contra posiciones azerbaiyanas y asentamientos civiles.
El conflicto armenio-azerbaiyano se remonta a los tiempos de la Unión Soviética, cuando a finales de la década de 1980 el territorio azerbaiyano de Nagorno Karabaj, poblado mayoritariamente por armenios, pidió su incorporación a la vecina Armenia, tras lo cual estalló una guerra que causó unos 25.000 muertos.
Al término de los combates, las fuerzas armenias se hicieron con el control de la región y también ocuparon vastos territorios azerbaiyanos, que llaman “franja de seguridad”, para unirlos a Armenia.