Washington. [EFE]. Estados Unidos alcanzó este lunes la cifra de 3.823.369 casos confirmados de COVID-19 y la de 140.922 fallecidos, de acuerdo con el recuento independiente de la Universidad Johns Hopkins.
Pese a que Florida, Texas y California son ahora los estados con más contagios diarios, Nueva York se mantiene todavía como el estado más golpeado en Estados Unidos por la pandemia, con 407.326 casos confirmados y 32.506 fallecidos.
Tan solo en la ciudad de Nueva York han muerto 23.411 personas.
A Nueva York le siguen en número de fallecidos la vecina Nueva Jersey con 15.715, Massachusetts con 8.433 y California con 7.746.
Otros estados con un gran número de muertos son Illinois con 7.494, Pensilvania con 7.018, Michigan con 6.373, Florida con 5.072 o Connecticut, con 4.406.
En cuanto a contagios, California es el segundo estado -solo por detrás de Nueva York- con 394.936 casos, Florida el tercero, con 360.394, y Texas el cuarto, con 340.621.
El balance provisional de fallecidos -140.922- ha superado ya con creces la cota más baja de las estimaciones iniciales de la Casa Blanca, que proyectó en el mejor de los casos entre 100.000 y 240.000 muertes a causa de la pandemia.
El presidente estadounidense, Donald Trump, rebajó esas estimaciones y se mostró confiado en que la cifra final estaría más bien entre los 50.000 y los 60.000 fallecidos, aunque luego auguró hasta 110.000 muertos, un número que también se ha superado.
Por su parte, el Instituto de Métricas y Evaluaciones de Salud (IHME) de la Universidad de Washington, en cuyos modelos de predicción de la evolución de la pandemia se fija a menudo la Casa Blanca, calcula que Estados Unidos llegará al mes de octubre con unos 200.000 muertos y que para las elecciones presidenciales del 3 de noviembre podría rozar los 225.000.