Un matrimonio de Tampa (Florida, Estados Unidos) acusó a un hospital de la ciudad de haber perdido el cuerpo de su fallecido hijo recién nacido y le reclamó una compensación de más de 30.000 dólares por daños y perjuicios, informaron medios locales.
Kathryn y Travis Wilson alegan en una demanda judicial que el hospital St.Joseph’s manejó negligentemente el cuerpo de su hijo Jacob, muerto a los tres días de nacer en ese centro, y les causó un estrés emocional “cruel”.
Jacob nació el 25 de febrero de este año y tras su muerte por causas no especificadas en la demanda, su cuerpo fue llevado a la ciudad de Orlando (Florida) para una autopsia.
La empresa contratada para el traslado por el hospital trajo de regreso a Tampa el cuerpo de Jacob y así se lo comunicó el centro médico el 5 de marzo a los Wilson, que a partir de la llamada empezaron a preparar el funeral de su hijo.
Sin embargo, pocos días después el hospital les comunicó que no habían podido encontrar el cuerpo del bebé.
Por ese motivo los Wilson demandaron al hospital y reclamaron una compensación monetaria.
La empresa propietaria del hospital envió un comunicado que reproducen los medios locales en el que señala que ha hecho todo los esfuerzos posibles por dar con el cuerpo de Jacob y manifiesta su solidaridad con los padres por la pérdida de su hijo.
”Tambien lamentamos profundamente no haber sido capaces de localizar sus restos. La dirección y el personal de todas las morgues de St. Joseph’s estamos determinados a que esta situación inédita no vuelva a suceder”.
En la demanda presentada en los tribunales del condado Hillsborough los Wilson dicen haber sufrido un trauma psicológico y emocional que se ha manifestado en “dolor físico, angustia y la perdida de la capacidad de disfrutar de la vida” y califican de “ultrajante” e “intolerable en una comunidad civilizada” la conducta del hospital.
Fuente: EFE