El miércoles que pasó regresó el San Fermín luego de dos años de ausencia por la pandemia del COVID-19 y con él retorna la fiesta a Pamplona durante poco más de una semana, conciertos, procesiones religiosas, bailes folclóricos, mucho vino y, por supuesto, toros que corren despavoridos en los muy famosos encierros.
Famosos, pero también criticados por algunas asociaciones que alzan la voz en su contra y aunque su protesta se escucha tímida en medio del griterío en el chupinazo, tienen motivos para criticar los encierros, pese a que la fiesta cuenta con aprobación de muchas personas.
Quienes están a favor de la fiesta no solo se apoyan en el beneficio económico que genera San Fermín a la ciudad gracias a la llegada de turistas de todo el mundo, sino también al peso de la tradición que, pese a algunos cambios a través del tiempo, sigue tendiendo la esencia de la festividad que siempre fue.
Sin embargo, la polémica se alimenta y mantiene. Ya desde el 2009, la organización AnimaNaturalis alzaba su voz de protesta en la BBC sobre el miedo y el sufrimiento psicológico que sienten los toros al ser perseguidos y golpeados, terminando con lesiones como patas o cuernos rotos al tropezar en las curvas.
En la actualidad, AnimaNaturalis en sus redes sociales recuerda que por 18 años consecutivos -junto a PETA- organiza una protesta de alto impacto contra la tauromaquia en Pamplona
“Aunque se están poniendo grandes esfuerzos para volver a torturar toros en Pamplona, en otras ciudades navarras como Tafalla, probablemente no haya temporada taurina. El desinterés por este espectáculo de sangre es algo palpable en la sociedad, y la gente a quienes les repugnan las tradiciones crueles con animales sólo van en aumento”, dijo Jana Uritz, representante de AnimaNaturalis.
En 2021, PETA envió una carta al alcalde de Pamplona ofreciéndole 298.000 euros a la ciudad si se compromete a erradicar “definitivamente” los sanfermines y sus posteriores corridas de toros.
“Reconocen que es injusto incitar a animales sensibles por calles resbaladizas o enfrentar a un hombre que empuña una espada contra un animal desorientado y reacio. Por eso, la gente de todo el mundo quiere ver el final de los encierros y las corridas de toros”, apunta Ingrid Newkirk, fundadora de PETA, en la carta que replicó el diario Público.
¿Qué sucede con los toros después de los encierros?
Según explica AnimaNaturalis, todos los toros que corren en los encierros luego son asesinados en la plaza taurina de la ciudad. Aida Gascón, directora de la organización, explicó en 2019 que el encierro sirve en realidad “para llevar a los toros a los corrales de la plaza”, donde luego, por la tarde, “los torturan y matan”.
Dijo que solo hay una excepción: los toros que resultan heridos o mueren en los encierros son reemplazados por otros, que finalmente perecerán frente a los toreros en las corridas.
“Si está herido (luego del encierro) de frente irá al matadero”, revela Gascón.