Han pasado más de 50 horas de viaje desde que los tigres ‘Sandro’, ‘Mafalda’ y sus hijos ‘Messi’ y ‘Gustavo’ salieron desde San Luis, Argentina, hasta el santuario Lionsrock, en Sudáfrica, para ser liberados en su hábitat.
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Todos los animales están pasando una recuperación física y psicológica tras vivir 15 años encerrados en un vagón en la provincia de San Luis, en Argentina.
Los animales fueron hallados viviendo sobre sus propios excrementos y siendo alimentados una vez a la semana. Según La Nación, el caso indignó a la sociedad argentina.
“Estamos felices, ya que (el viaje) salió todo bien, perfecto. El que más nos preocupaba era Sandro, el macho más grande, ya que está algo ciego, con sus patas mal y algunas deficiencias. Estamos muy orgullosos de su fuerza durante el viaje”, contó Luciana D’Abramo, directora de Four Paws, ONG internacional a cargo del rescate.
Mediante sus redes sociales, la organización contó cómo fue la llegada a Lionsrock, un lugar situado a cuatro horas de Johannesburgo, capital de Sudáfrica.
En los videos de la liberación de los cuatro tigres se puede ver el momento en que se abren las puertas de las cajas y ellos tocan por primera vez el pasto.
Ahora cuentan con 2500 metros cuadrados para vivir, mientras que el vagón de tren donde permanecían encerrados era de solo 75 metros.
Se conoce que los tigres adultos, un macho y una hembra, se quedaron abandonados por un circo que jamás regresó. La pareja se reprodujo y tuvo dos tigres.