El viernes en la mañana, según hora japonesa, un extraño se acercó al ex primer ministro nipón Shinzo Abe y le dio un disparo mortífero que acabó con su vida en unas horas.
El terrible hecho se dio en la ciudad de Nara, al oeste de Japón. El político se encontraba cerca a una estación del tren dando un mitin político cuando se escucharon dos disparos y Abe cayó.
Fue llevado de emergencia a un hospital cercano en un helicóptero, donde se confirmó su muerte. Según fuentes locales, es difícil que haya un crimen en Japón por la baja tasa de homicidios.
Sin embargo, este magnicidio - el asesinato a una persona importante en política sea por su cargo o su poder- no es el único que se ha dado en la historia y recordaremos alguno de ellos.
El pasado 7 de julio del 2021, el presidente de Haití Jovenel Moïse fue asesinado a la 1 de la tarde (hora local). Él se encontraba en su casa cuando un grupo de hombres armados lo asesinaron.
Su esposa, la primera dama Martine Moïse, sobrevivió el ataque y fue hospitalizada, luego fue evacuada a Estados Unidos y sobrevivió.
La muerte del expresidente de Estados Unidos, John F. Kennedy, fue uno de los más llamativos del mundo, sobre todo por la gran cantidad de conspiraciones que hay alrededor.
A mediodía del 21 de noviembre de 1063, Kennedy iba acompañado de su esposa Jacqueline cuando dos balazos lo derribaron. Estas balas cayeron cerca a la espina dorsal y, tras intentos inútiles, no lograron salvar al presidente, quien falleció al otro día en la madrugada.
Meses después, la comisión Warren declaró a Lee H. Oswald como el responsable, él señaló que era un “patsy”, término que usaba la mafia para nombrar a un chivo expiatorio.
El papa Juan Pablo II sufrió un intento de asesinato el miércoles 13 de mayo de 1981, cuando se encontraba en la Plaza de San Pedro y un joven llamado Mehmet Ali Agca disparó contra él cuatro veces.
El papa perdió bastante sangre y fue hospitalizado. El joven fue sentenciado a cadena perpetua y luego el papa lo perdonó, por lo que lo dejaron libre y luego enviado a Turquía.
El 6 de setiembre del 2018, Jair Bolsonaro, entonces candidato a la presidencia de Brasil, fue apuñalado en pleno acto de campaña en la ciudad Juis de Fora, en el estado de Minas Gerais.
En las imágenes divulgadas se ve como un sujeto llamado “Mito” alcanzó el abdomen del político.
Se pensaba que era una lesión leve, pero no, Bolsonaro sobrevivió por la rápida atención que recibió y fue operado por una perforación de los intestinos grueso y delgado.
Sin embargo, no acabó ahí, sino que tuvo que ser operado dos veces más para garantizar un buen estado de salud.
En Japón no son frecuentes los ataques políticos, pero en su historia revisaremos estos recientes casos:
Agosto de 2006: El exsecretario general del PLD, Koichi Kato, sufrió el incendio de sus casas y oficinas. Se cree que una persona afiliada a un grupo de extrema derecha lo hizo.
Abril 2007. El alcalde de Nagasaki, Iccho Itoh, recibió dos disparos frente a su oficina de campaña y perdió la vida horas después.
Abril de 2015. Arrestaron a un hombre que envió un dron con material radioactivo a la residencia de Shinzo Abe en Tokio, quien era primer ministro en ese momento.
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