Chile sumó este sábado 6.469 nuevos casos de coronavirus y 104 decesos, que dejaron el balance total de la pandemia en más de 1,2 millones de infectados totales y 26.457 muertes desde que se registró el primer caso hace más de un año.
La tasa nacional de positividad de las últimas 24 horas (número de contagios por cada 100 pruebas de PCR) fue del 9,4 % tras llevarse a cabo más de 64.000 exámenes, informaron las autoridades sanitarias.
El país vive desde mediados de marzo los momentos más críticos de una segunda ola de la pandemia que puso contra las cuerdas al sistema sanitario y obligó a cerrar las fronteras y declarar cuarentena total para más del 90 % de la población.
La saturación de las unidades de cuidados intensivos se mantiene desde hace semanas por encima del 96 % y en las últimas 24 horas el número de pacientes críticos fue de 3.336, lo que implica que solo quedan alrededor de 200 camas libres disponibles en unidades de este tipo.
Desde hace días, los casos nuevos diarios rondan los 7.000, y la tasa de positividad se ha mantenido sin grandes cambios, lo que llevó a las autoridades sanitarias a desconfinar desde el pasado jueves a una veintena de barrios de todo el país, varios de ellos de la capital, que llevaban un mes en cuarentena total.
En paralelo a la segunda ola, el país lleva a cabo uno de los procesos de vacunación más exitosos del mundo, con más de 8 millones de personas (más del 50 % de la población) inoculadas con al menos una dosis y más del 44 % recibió ya las dos dosis.
La mayor parte de las vacunas administradas son Coronavac, del laboratorio chino Sinovac, del que Chile ha recibido casi 14 millones de dosis; Pfizer/BioNTech, del que llegaron 2,3 millones, y AstraZeneca, que se aplicará a mujeres mayores de 55 años y hombres mayores de 18 años.
El país, que se encuentra desde hace más de un año en estado de excepción por catástrofe, también aprobó el uso de la vacuna del laboratorio chino Cansino, de la que comenzará a recibir lotes este mes.
Fuente: EFE
