Deborah Birx, coordinadora de la unidad antipandemia de la Casa Blanca, anunció que dejará su puesto una vez que el presidente electo, Joe Biden, asuma el cargo el 20 de enero, tras verse envuelta en un escándalo por participar de una reunión familiar en medio de la pandemia de coronavirus.
“Me retiraré”, dijo a la emisora Newsy el martes.
La portavoz de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, confirmó la salida de Birx.
La exmilitar de 64 años, especialista de renombre mundial en la lucha contra el sida, fue criticada recientemente por asistir a una reunión familiar a finales de noviembre en Delaware, después del Día de Acción de Gracias, cuando pidió a los estadounidenses que se quedaran en casa para frenar la pandemia.
“Esta experiencia ha sido un poco abrumadora. Ha sido muy difícil para mi familia”, dijo a Newsy.
Pero incluso antes de este episodio, Birx (que junto con Anthony Fauci encarnó desde febrero el ala científica de la unidad antipandemia gubernamental), vio mermar su reputación.
A pesar de defender las medidas sanitarias para evitar la propagación del virus, Birx no fue suficientemente firme ante un presidente (Donald Trump) que minimizó la importancia de la pandemia y divulgó desinformación.
Cuando Trump planteó la idea de inyectar desinfectante y utilizar la luz ultravioleta en el interior del cuerpo para luchar contra el COVID-19, Birx se tomó las manos y desvió la mirada.
En el verano boreal, Birx presentó coloridos gráficos que pretendían mostrar que Estados Unidos estaba a punto de descender del pico pandémico, una predicción que resultó contraria a la realidad.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, dijo posteriormente que no confiaba en Birx, y que el equipo de Biden no había dado ninguna indicación de que pretendieran mantenerla en su equipo.
Fuente: AFP