Una periodista de la cadena estadounidense NBC, que dio positivo a una prueba del nuevo coronavirus, sorprendió al advertir a los jóvenes que buscan y desean de manera incansable que se ponga fin a la cuarentena para evitar los contagios.
Según menciona el medio “Infobae”, Dasha Burns dejó una clara advertencia para todos aquellos que son contemporáneos a ella: los jóvenes no son inmunes al coronavirus. Incluso, dijo que si aun lo fueran, actuar de manera rápida puede tener efectos graves para los esfuerzos de la sociedad y los grupos de riesgo.
La joven periodista contó su experiencia en un diario audiovisual y dijo que nunca pudo confirmar de manera certera que tenía coronavirus, ya que las pruebas estaban reservados para aquellos que necesitaban ser hospitalizados.
Por tal motivo, los doctores le dijeron que era un “presunto positivo” y le ordenaron que se aislara en su vivienda. En medio de su confinamiento, Burns tuvo fiebre, tos, dolores en el pecho, dificultad para respirar y náuseas.
“Mi fiebre se mantuvo cerca de los 39 grados y no pude lograr que bajara por días. El dolor de cabeza y de cuerpo que la acompañaron se tornaron insoportables. Sentía que mis articulaciones estaban artríticas. No podía dormir a la noche y estaba inmóvil durante el día", aseguró Burns.
"La fatiga era extrema. Cuando finalmente me bajó la fiebre, los problemas respiratorios se volvieron peores y respirar resultaba doloroso. En un momento, tuve 24 horas de tregua. Pero luego los síntomas volvieron para vengarse. Agregué náuseas extremas al paquete. Mantenerme hidratada se convirtió en un desafío y mi objetivo principal”, agregó.
La periodista logró superar el virus y confiesa de que “nunca había sentido nada parecido" y eso que tuvo "lo que podría considerarse un caso ‘leve’”.
Tras estar bien y haciendo una reflexión de lo que tuvo que pasar, Burns sostiene que “muchos de nosotros tenemos una mentalidad que es un poco a prueba de balas. Por eso nos tiramos en paracaídas, realizamos caminatas peligrosas y comemos comida callejera de procedencia sospechosa. Pero esto no es una aventura”.
No obstante, fue más directa y les demostró a los jóvenes que esta enfermedad es real. La profesional dijo que las personas de la ciudad de Nueva York de entre 18 y 44 años representan un 38% de los casos y que un 24.7% de las hospitalizaciones a nivel nacional corresponden a aquellos que están en el rango de 18 y 49 años.
“Tengo menos de 30 años. No tengo enfermedades preexistentes. Fui una de las afortunadas. Y fue lo más enferma que he estado en mi vida. Fue una disrupción para mi trabajo, el de mi esposo, y aterrorizó a mi familia, que vive del otro lado del país", sostuvo la periodista.
"Todavía estoy recuperando las fuerzas y acostumbrándome a la nueva normalidad. Soy solo un ejemplo, pero si mi generación no tiene cuidado, podríamos hacer que la pandemia sea peor para todos, nosotros incluidos”, adicionó Burns.
El nuevo coronavirus ha provocado al menos 174,001 muertos en el mundo desde que apareció en diciembre, según un balance establecido por AFP sobre la base de fuentes oficiales.
Desde el comienzo de la epidemia se contabilizaron más de 2′525,240 casos de contagio en 193 países o territorios.
La cifra de casos diagnosticados positivos solo refleja sin embargo una parte de la totalidad de contagios debido a las políticas dispares de los diferentes países para diagnosticar los casos, algunos solo lo hacen con aquellas personas que necesitan una hospitalización.
La cantidad de muertos en Estados Unidos, que registró su primer deceso vinculado al virus a fines de febrero, asciende a 43,200. El país registró 804,194 contagios. Las autoridades consideran que 73,533 personas sanaron.
(Con información de AFP)