1 / 8 Un Tamarin marrón plateado o un mono titi gris (saguinus leucopus) se representa en Medellín. El saguinus leucopus es una especie en peligro de extinción endémica del norte de Colombia. (Foto: AFP/Joaquín Sarmiento)
2 / 8 Una ardilla atraviesa una cerca mientras el sol brilla en el distrito de Kreuzberg de Berlín. (Foto: AFP/David Gannon)
3 / 8 Una familia de jabalíes con tres cachorros deambula por una calle de los barrios de Carmel, en la ciudad norteña de Haifa, Israel. (Foto: EFE/Abir Sultan)
4 / 8 Tres razas (corzo hembra) cruzan una carretera casi vacía en Zakopane, sur de Polonia. El corzo europeo es endémico de las montañas Tatra que extiende la frontera entre Polonia y Eslovaquia. (Foto: EFE/Grzegorz Momot Poland)
5 / 8 Gansos silvestres en orillas del río Meno en Fráncfort, Alemania, durante la pandemia de la enfermedad del coronavirus. (Foto: EFE/Armando Babani)
6 / 8 Un ciervo salvaje, de un rebaño que solía mezclarse y ser alimentado por la población local, deambula por una calle desierta por el coronavirus COVID-19, en la ciudad portuaria de Trincomalee. Sri Lanka. (Foto: AFP/STR)
7 / 8 Los leones marinos se ven en una calle del puerto de Mar del Plata durante el bloqueo impuesto debido a la nueva pandemia del coronavirus, a unos 400 km al sur de Buenos Aires, Argentina. (Foto: AFP/Mara Sosti)
8 / 8 Vista de unos pavos reales junto al parque Fuente del Berro en Madrid durante el confinamiento por el estado de alarma del avance del coronavirus. (Foto: EFE/JuanJo Martín)
Animales exóticos o salvajes en las grandes ciudades del mundo solo se veían en parques nacionales o zoológicos. Sin embargo, la llegada de la pandemia del coronavirus (COVID-19) borró a los humanos de las calles por la necesidad de cumplir una estricta cuarentena, mientras los animales aprovechan el momento.
El trajín del día a día, la rutina de ir al trabajo, al centro de estudios o ir compras, salir a divertirse con la familia o amigos, todas esas cosas cotidianas quedaron de lado. Las calles que un día lucieron abarrotados de gente, hoy lucen vacías.
Más de 3.600 millones de personas en todo el mundo, es decir un 46,5% de la población del planeta, están confinadas. Casi la mitad del globo cumple cuarentena por la pandemia del coronavirus.
Esto ha provocado cambio en los hábitos de las ciudades, pero también ha provocado que algunos animales salvajes se animen a salir a las calles de las grandes ciudades para trasladarse de un lugar a otro, algo antes inimaginable.
Al menos eso era poco probable. La población humana expandió sus dominios y arrinconó a la flora y fauna para aprovechar los espacios en beneficio propio. Hoy, la naturaleza se cobra una pequeña revancha.
Animales como jabalíes, gansos, monos, leones marinos, chacales, cabras, ciervos y hasta pavo real se han visto caminando sobre el asfalto de ciudades hoy fantasmales.