El 15 % de los chilenos con un diagnóstico de coronavirus (COVID-19) confirmado sigue saliendo a trabajar más de una vez por semana, reveló un estudio del Colegio Médico y la Universidad de Chile.
El 43,6 % de las personas con “síntomas sospechosos” también mantiene su actividad laboral y utiliza el transporte público al menos dos veces por semana.
Según los autores del informe, los datos representan un “escenario preocupante” y responden a las “importantes diferencias entre grupos sociales”, que influyen “fuertemente” en la posibilidad de hacer cuarentena.
En el reporte, que forma parte del Monitoreo Nacional de Síntomas y Prácticas COVID-19 en Chile (MOVID-19), participaron 39.885 personas de 321 comunas (localidades) del país durante las últimas seis semanas.
″En un contexto de alta transmisión viral cualquier persona con un cuadro sintomático debe ser tratada como un caso probable, y en ese sentido debe ser puesto en aislamiento", demandó Cristóbal Cuadrado, uno de los investigadores.
Para el académico de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile, la información sobre las prácticas de los chilenos durante la pandemia del coronavirus ponen de relieve la importancia de que “haya un mensaje claro e inequívoco a la ciudadanía de que cualquier persona con síntomas o contacto con un caso probable debe aislarse”.
Los contagiados con coronavirus en Chile superaron este miércoles los 82.000 casos y desde el inicio de la pandemia se han registrado 841 fallecidos.
Las autoridades sanitarias informaron de que el porcentaje de ocupación de camas críticas en el país llega al 86 %, mientras que en la región Metropolitana, donde se ubica la capital del país y se concentran la mayoría de los casos, se eleva hasta el 95 %.
La brecha social se refleja en la pandemia
El nivel de educación, el lugar de residencia y la afiliación a la sanidad pública o privada condicionan “fuertemente” el comportamiento de los chilenos ante la pandemia, confirmó el estudio del Colegio Médico y la Universidad de Chile.
Así, las comunas con mayor hacinamiento registran un “alto riesgo de brotes intradomicilarios”, y precisamente en estos barrios los datos apuntan a un “aumento potencialmente oculto de casos”.
La brecha social también influye en la posibilidad de cumplir el aislamiento y teletrabajar.
Entre los pacientes “diagnosticados” (los casos probables que no han podido confirmar el contagio con un examen PCR) que tienen un nivel educacional más bajo salen a trabajar en un 27 %, mientras que los que tienen más estudios no llegan al 20 %.
“Los datos muestran un escenario preocupante. Existen importantes diferencias entre distintos grupos sociales en cuanto a la posibilidad real de aislar casos sospechosos y realizar cuarentena”, alertó la investigadora del Centro de Estudios de Conflicto y Cohesión Social Mónica Gerber.
Cuando las condiciones materiales son deficientes, el aislamiento “puede ser incumplido para conseguir recursos para la subsitencia”, valoraron los autores del sondeo.
Recomendaciones: Residencias sanitarias y subsidios
Entregar subsidios directos a los hogares sin ingresos debido a la cuarentena obligatoria en toda la región Metropolitana o aumentar la oferta de residencias sanitarias son dos de las propuestas que recoge el informe.
En este sentido, el Ministerio de Salud informó este miércoles que dispone de 2.504 cupos de residencias sanitarias para personas con COVID-19 que no pueden realizar la cuarentena en su casa.
En las últimas 72 horas, se habrían trasladado 825 personas a algunas de las 58 residencias sanitarias que se han habilitado a este efecto en el país, informaron ayer las autoridades.
En algunos casos se traslada a grupos familiares enteros, para que puedan pasar los 14 días de cuarentena juntos, o a personas con COVID-19 que viven con enfermos crónicos o personas mayores para no exponerlas al riesgo de contagio.
La zona metropolitana de Santiago avanza hacia su segunda semana en “megacuarentena”, con cerca de 7 millones de personas confinadas en sus casas, una medida que se prorrogó este miércoles hasta el 5 de junio.
Chile se encuentra bajo estado de excepción, con toque de queda nocturno desde mediados de marzo, con colegios, universidades y fronteras cerradas, así como la mayoría de los comercios que no sean de primera necesidad.
Fuente: EFE