Beijing [AFP]. China anunció este viernes solo ocho nuevos contagios por coronavirus, la cifra más baja desde que comenzó a publicar estadísticas de la epidemia a mediados de enero.
Entre estos casos adicionales, cinco se detectaron en la ciudad de Wuhan (centro), el epicentro del COVID-19 donde el virus apareció a finales de 2019.
Los otros tres (dos en Shanghái y uno en Beijing) son de personas procedentes del extranjero. No se ha especificado su nacionalidad.
China cuenta así con 88 casos “importados” de otros países: un nuevo desafío para las autoridades sanitarias, que habían logrado detener la propagación del COVID-19 en el territorio nacional.
El ministerio de Salud también anunció el viernes otras siete muertes, lo que eleva el total a 3.176 en China continental (excluyendo Hong Kong y Macao). Más de 80.000 personas han sido infectadas en el país.
Con la mejora de las últimas semanas, las autoridades han comenzado a flexibilizar las restricciones impuestas a los 56 millones de habitantes de la provincia de Hubei, cuya capital es Wuhan.
La mayoría de las ciudades están confinadas desde finales de enero. Pero las personas sanas de las zonas poco afectadas podrán ahora viajar dentro de las fronteras provinciales.
Estas medidas no atañen a los habitantes de Wuhan por el momento. Pero muchas empresas de la ciudad pueden reanudar la actividad.