En varios países se ha tomado como medida preventiva la cuarentena, pero en China-donde se propició el brote del coronavirus (COVID-19)-un porcentaje de parejas que estuvieron encerrados ha propiciado que las solicitudes de divorcio se disparen.
Según el Global Times, periódico vocero del Partido Comunista de China, las demandas de divorcio aumentaron en la ciudad de Xi´an, capital de la provincia de Shaanxi y famosa por sus guerreros de terracota.
Los registros civiles de los distritos en esa ciudad de China volvieron a abrir el 1 de marzo, recibiendo peticiones de divorcio que alcanzó su máximo tope pese a que conseguir el certificado de divorcio suele tramitarse entre media hora y cuarenta minutos. Además, luego del proceso se debe desinfectar la oficina para que no haya más contagios del coronavirus.
“Como consecuencia de la epidemia, muchas parejas han estado confinadas en casa durante más de un mes, lo que ha hecho aflorar conflictos internos. Eso se añade a que el registro ha estado cerrado también un mes, por lo que hemos visto un acusado aumento de citas para divorcios”, dijo Wang, un funcionario del gobierno al periódico chino.
Aunque por ahora solo se tiene veracidad sobre Xi’an, hay otras ciudades de China que también estarían pasando sobre lo mismo.
Sin embargo, algunos funcionarios mencionaron que la ola de pedido de divorcios se debe a que las oficinas permanecieron cerradas por más de un mes debido a la cuarentena por el coronavirus.