Un tren de carga de una empresa minera fue incendiado en Antofagasta, Chile por un grupo de desconocidos, en medio de las protestas que vive el país desde el 18 de octubre del año pasado.
El suceso tuvo lugar en la noche de este lunes en la intersección de dos de las principales calles de la ciudad, 21 de mayo con Andrés Sabella, donde la línea ferroviaria divide la ciudad entre poniente y oriente y lugar habitual de reunión de algunas personas antes de comenzar a manifestarse desde que comenzaron las protestas, según relató una fuente de Bomberos.
En esta ocasión, algunos de los congregados lanzaron bomas molotov contra la locomotora a su paso por el lugar, además de piedras.
La tripulación abandonó el tren en pleno trayecto, resultando dos personas heridas aunque no de gravedad.
El tren siguió avanzando en llamas durante más de un kilómetro, sin maquinistas, logrando luego ser controlada y las llamas apagadas, un operativo que fue calificado por Bomberos como “complejo”.
La máquina siniestrada pertenece a la empresa de transporte Fcab, que a través de un comunicado señaló que es el segundo ataque de ese tipo que sufren en menos de 30 días.
Chile vive su convulsión social más grave desde el fin de la dictadura de Augusto Pinochet, con al menos una treintena de muertos, miles de heridos y señalamientos por presuntas violaciones a los derechos humanos por parte de las fuerzas de seguridad.
Lo que empezó siendo un llamado de los estudiantes a colarse en el metro de Santiago para protestar contra el aumento de la tarifa se convirtió en una revuelta por un modelo económico más justo, que ha dejado también episodios de violencia extrema con saqueos, incendios, barricadas y destrucción de mobiliario público.
Aunque las manifestaciones han perdido fuerza, sigue existiendo descontento en las calles y la crisis parece lejos de solucionarse, pese a las medidas sociales anunciadas por el Gobierno y al acuerdo parlamentario para convocar un plebiscito sobre una nueva Constitución.
Fuente: EFE