Las mujeres deben mantenerse saludables con la dosis exacta de ejercicios y alimentación adecuada para cada etapa de su vida, atendiendo los criterios como edad, peso, actividad física diaria y, sobre todo, estado hormonal.
El tipo de dieta no difiere a la del hombre, pero sí debe contener algunos nutrientes básicos durante las diferentes etapas de su vida.
Para Janeth Veramendi, nutricionista del Club Médico Deportivo Bodytech, es fundamental que cada mujer conozca los cambios metabólicos de su cuerpo para mantener el peso adecuado y estar saludable en todas las edades.
1. Niñez. En esta etapa de vida, se crean los hábitos alimenticios y por ese motivo es necesario que en vez de prohibirles determinados alimentos que no suman a su desarrollo y les hacen mal, les enseñemos cuáles sí son necesarios.
Durante la niñez, el calcio es básico para una correcta formación de los huesos y los dientes. Además, los ácidos grasos esenciales son indispensables para un buen crecimiento físico y para el desarrollo del sistema nervioso.
El consumo de pescado entre 2 a 3 veces por semana garantizará un buen aporte de dichos nutrientes. En la niñez la alimentación debe ser súper completa y balanceada,
2. Pubertad y adolescencia. En estas dos etapas, las mujeres necesitan un mayor aporte de energía y macronutrientes para el crecimiento y desarrollo, siendo el hierro uno de los minerales de especial importancia durante la menstruación y podemos encontrarlo en alimentos como sangrecita de res, bazo y carnes rojas, entre otros.
3. Adultez. Haz ejercicios entre 3 a 4 veces por semana; en esta etapa es importante para mantener un corazón sano, tener vitalidad y mejorar la composición corporal. Así mismo, se debe evitar el consumo excesivo de azúcar, harinas refinadas y grasas saturadas.
4. En el embarazo. En un estado de gestación sin riesgos de aborto o parto prematuro, se recomienda la actividad física de baja intensidad para ayudar a la circulación sanguínea materno-fetal y un mayor requerimiento calórico y consumo de proteína.
Para el desarrollo del bebé, es necesario el consumo de alimentos ricos en calcio, hierro, vitamina B12, yodo y ácido fólico siendo el hierro el de mayor relevancia para el buen crecimiento y desarrollo del bebé y así evitar malformaciones congénitas.
Se aconseja consumir alimentos ricos en este mineral, especialmente vegetales de hojas verdes, hígado de res, frutas, levadura y frutos secos como nueces y almendras.
5. Menopausia. En esta etapa se presentan alteraciones a nivel hormonal que afectan a la fijación de ciertas sustancias, haz ejercicios como trote o carrera y algo de fuerza para cuidar la masa muscular y la masa ósea, pero también consume calcio y vitamina D. Los alimentos ricos en estos minerales se encuentran en los lácteos desnatados, pescado y frutos secos.