Un perro adoptado en casa es un nuevo integrante de la familia y merece los mejores cuidados

Un perro adoptado casi siempre ha sufrido abandono y esa circunstancia lo hace especial. Es verdad que puede mostrarse desconcertado y temeroso al llegar a casa, pero con el pasar de los días se mostrará feliz por esa segunda oportunidad que le acabas de dar.

La doctora Luz Marina Vidal, de la Clínica Veterinaria ‘Surco’, explica que, en principio, es importante que pase por un control médico para que se le desparasite (a nivel externo e interno) y se determine su edad y peso.

Si está desnutrido, la especialista sugiere alimentarlo con pollo, arroz y una pizca de sal. De forma gradual se le cambiará esa comida casera por un alimento balanceado que vaya acorde con sus años. “Apenas gane peso, será vital vacunarlo. Antes no porque su organismo está muy débil para recibir el fármaco”, advierte.

COMPORTAMIENTO

Conviene salir a la calle con el perro, siempre sujeto con una correa, y no soltarlo. Los primeros días los paseos serán cortos puesto que se mostrará todavía desconfiado. Con el tiempo, conocerás más al animal y él también se sentirá más seguro a tu lado. Ten en cuenta que el perro solo vive el presente, por lo que puedes recurrir al cariño y los mimos para borrar sus malas experiencias pasadas. Luego de ese periodo de adaptación, él corresponderá tus atenciones con más amor del que imaginas.

SABÍAS QUE...

- Debes asegurarte de que el animalito tenga una cama y un lugar específico para situar su plato de comida y agua.

+ DATOS
Suéltalo en lugares cerrados, como en casa, y observa qué juguetes le gustan más y dónde está más cómodo.