Sabemos que sueles desesperarte cuando tu pequeño no quiere comer frutas, sobre todo porque este alimento posee un sinfín de vitaminas y nutrientes que lo ayuda en su desarrollo y crecimiento.
Por ello, los especialistas en nutrición indican que es importante que prediques con el ejemplo, es decir, que si tu hijo te ve comiendo frutas sabrá que es algo bueno y que él también debe hacerlo, pero si aun así existen problemas en el consumo de este alimento, ¡no te desesperes!, porque Karyn Reyna Ocampo, nutricionista de la Clínica Ricardo Palma, te brinda los siguientes consejos:
A TIEMPO. Inicia la inclusión de estos alimentos desde los 6 meses. Dale a tu niño frutas en pequeñas raciones, primero papillas y luego picadas.
CONSTANCIA. Si tu hijo rechaza a la primera la manzana o la granadilla, vuélvelo a intentar después de unos días. Quizá necesita más tiempo para acostumbrarse al sabor. Nunca utilices la fuerza.
CREATIVIDAD. Puedes decorar el plato de manera divertida para captar su atención, con frutas de varios colores y dándole formas de caritas o dibujos.
COMPLÁCELO. Dale de comer las frutas que a tu niño le gustan. Luego, podrás introducir otros alimentos sin mucho esfuerzo.
SABÍAS QUE...
No le quites la cáscara a la fruta porque esta contiene fibra, que es muy buena para la digestión.