Tener un carro propio es una comodidad para la familia, aunque también significa un gasto. Para no afectar el bolsillo, la solución no está en deshacerse del vehículo, sino en realizar gastos bien pensados.
- Todo auto debe tener sus herramientas básicas de mantenimiento, como una gata para cambiar llantas, un inflador, una batería y un arrancador. A todo esto se le denomina ‘kit mecánico’, en el que vale la pena invertir porque ayuda a supera cualquier contratiempo. Adquiérelo en las tiendas de accesorios de autos de tu preferencia.
- Aromatizador, franela y limpiadores con silicona (para los asientos) son los productos que con más frecuencia se adquieren. Puedes comprarlos en ofertas de 3X2 que ofrecen algunos supermercados.
- Ahorra lavando el carro tú mismo. Algunos miembros de la casa pueden ayudar en esta tarea. Si lo hacen una vez por semana, el trabajo de limpieza no será muy tedioso. Además, así podrán reunir un fondo de dinero para la siguiente revisión mecánica que se realiza de forma periódica.
- A largo plazo, analiza convertir tu auto de gasolina a Gas Natural Vehicular (GNV) que te garantizará un ahorro de combustible significativo.
+ DATOS
Siempre necesitarás tener una llanta de repuesto. Cuando veas este producto en oferta, aprovecha y cómpralo.
SABÍAS QUE....
Luego de adquirir un vehículo, toma en cuenta las recomendaciones del fabricante. De no hacerlo, los daños en el automóvil y en tu bolsillo pueden ser enormes.