La mayoría de los bebés disfruta del baño. El contacto físico con el padre o la madre los relaja y el agua les divierte; sin embargo, a algunos recién nacidos les cuesta acostumbrarse a este hábito de higiene y, por ello, lloran.
Según los especialistas, esto sucede porque se sienten inseguros al ser una situación desconocida donde están sin ropa y sin apoyo.
Para que esta actividad sea mucho más fácil, y tu pequeño lo disfrute, sigue estos sencillos tips:
AGUA TIBIA. Pasar de una cálida mantita a una tina con agua, siempre será un cambio que alertará a tu bebé. Debes asegurarte de tener el agua a una temperatura alrededor de los 38° C, así evitarás que el agua muy fría o muy caliente lo inquiete.
TINA. No uses una tina muy grande porque se sentirá inseguro, utiliza una pequeña y llena 15 centímetros de agua.
JUEGO. Puedes cantarle e interactuar con él, o bien darle sus juguetes para que se mantenga entretenido.
CABEZA. Es común que se asuste cuando siente el agua directo en su cabeza y carita. Lo mejor es asear su rostro y cabello con una esponja o una toalla húmeda.
ORDEN. Empieza por su cabecita, sigue con el torso y los brazos, hasta terminar todo su cuerpo. Así tu bebé se irá acostumbrando y no lo tomarás por sorpresa.
TODO A LA MANO. Asegúrate de tener lo necesario a tu alcance: toalla, jabón, champú... porque puede ser estresante para él verte estirar los brazos y hacer malabares para alcanzar las cosas.
DIBUJOS. Haz que vea caricaturas o videos infantiles, donde los personajes tomen un baño. Así, lo verá como algo normal y divertido.